El palmero logra el aplauso, la risa y la complicidad de los 246 delegados
SANTA CRUZ DE TENERIFE, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
El candidato palmero a la Secretaría regional del PSC-PSOE, Manuel Marcos Pérez, proclamó hoy en el Auditorio de Tenerife que quien sea elegido tendrá que presentar un proyecto diferenciado para un "cambio urgente" en Canarias. Tras agradecer la renuncia de Arcadio Díaz Tejera al cargo y abogar por la unidad socialistas, insistió en la necesidad de contar con un partido que "inspire el sentido del deber hacia el prójimo".
"La ilusión es un capital que no hay que olvidar nunca. Hay que trabajar codo con codo este respaldo y ganar en 2011", señaló. "La nueva dirección regional tiene que tener una serie de compromisos. El que salga tendrá una gran responsabilidad que es un proyecto político diferenciado y distinguible frente a quienes gobiernan hoy Canarias. Hay que poner un proyecto distinto y diferenciado. Lo vamos a hacer con cercanía y proximidad. Si no somos cercanos, no llegamos a la gente", defendió Pérez, y señaló mirando al secretario saliente, Juan Fernando López Aguilar, que si la renovación era necesaria cuando se presentó, "ahora es urgente".
Pérez aseguró que durante la campaña ha estado escuchando. "He entendido por qué somos la única formación creíble: porque nosotros somos siete islas, con sus singularidades y hemos sido capaces de crear un partido con un proyecto para Canarias", defendió entre aplausos, al tiempo que dijo que los socialistas vertebran y que es el "partido que más se parece a Canarias", haciendo alusión a su presencia como candidato de una isla no capitalina.
El aspirante adelantó que el partido va a defender la autonomía de Canarias, así como que ha sido capaz de dar respuesta y atención a los problemas de Canarias en Europa. "Hemos defendido en el seno de la UE el que más ha defendido las singularidades de Canarias", recalcó, para rematar diciendo que nadie les va a dar lecciones de canariedad".
"Estamos representados en todas y cada una de las instituciones, pero los valores y las ideas progresistas los hacemos desde las instituciones en los cabildos de la Gomera o Gran Canaria o a los compañeros que tenemos gobernando en los ayuntamientos. Ahí estamos los socialistas. Damos la cada dí para los canarios", aseveró recibiendo el aplauso.
Pérez reconoció la labor "muchas veces con frío" del trabajo en la oposición. "La ilusión es un capital que no hay que olvidar nunca", aseveró. "Hay que trabajar codo con codo este respaldo y ganar en 2011. La nueva dirección regional tiene que tener una serie de compromisos. El que salga tendrá una gran responsabilidad que es un proyecto político diferenciado y distinguible frente a quienes gobiernan hoy Canarias. Hay que poner un proyecto distinto y diferenciado. Lo vamos a hacer con cercanía y proximidad. Si no somos cercanos, no llegamos a la gente", añadió.
"Aquí hacemos falta todos. Juan Fernando, si cuando te presentastes hacía falta el cambio, ahora es urgente", dijo Pérez, señalando que quiere contar con un equipo técnico para quienes estaban en la oposición, así como incluir a los jóvenes en la militancia y darles un lugar.
Habló de iliusión y se atrevió a recordar al ministro de Fomento, José Blanco, presente en la sala, ya que fueron senadores juntos, con la sonrisa de los asistentes. También rió cuando le recordó a Jerónimo Saavedra que era muy joven cuando entró en la militancia, y no perdió oportunidad para recordar sus 16 años como alcalde en el municipio palmero de San Andrés y Sauces.
"Si estuviera Antonio Castro (el presidente del Parlamento de Canarias), a lo mejor me daba unos minutitos, pero la compañera Ana Lupe es más rigurosa", dijo en tono jocoso logrando el aplauso del público. "Este es un proceso que hay que hacerlo con la autenticidad de nuestra alternativa, porque nuestro mensaje es un mensaje de prestigio. Este proyecto de los socialistas canarios es el que va a ser posible. Que se abran las velas del barco y que en 2011 ganemos otra vez", concluyó el también presidente del Grupo Parlamentario Socialista entre aplausos.
