PSdeG ve un "fracaso" no reformar el Estatuto en 2010 y que el Gobierno lo pida y Feijóo lo rechace, "el mundo al revés"

Actualizado: lunes, 8 febrero 2010 17:01

SANTIAGO DE COMPOSTELA, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -

El secretario xeral del PSdeG, Manuel Vázquez, advirtió hoy de que no reformar el Estatuto de Autonomía durante este año será "el gran fracaso de la legislatura" para el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo. "Si no somos capaces de equipararnos al resto de las comunidades autónomas con un Estatuto de primera, sería el gran fracaso", remachó.

Tras recordar que Feijóo "se cargó" la reforma desde la oposición, le pidió que "ahora no lo haga también desde el Gobierno", ya que cuenta con "la predisposición" de las fuerzas de la oposición. Por su parte, anunció la constitución de un grupo de trabajo "específico" para la creación de un nuevo texto. "Porque Galicia tiene derecho a equipararse en derechos y deberes a los ciudadanos del resto de España", justificó.

A mayores, preguntado por el hecho de que el Gobierno central proponga a la comunidad reformar el texto estatutario para obtener mayores competencias, toda vez que se cierra la vía del artículo 150.2 de la Constitución para su transferencia, el líder del PSdeG entendió se trata del "mundo al revés".

"Es el mundo al revés el Gobierno del Estado pida a la Comunidad autónoma que reforme el Estatuto y que el presidente de la Xunta, sabiendo que tiene como punto de partida el apoyo, por lo menos, del PSdeG, siga diciendo que no por orden de Génova", reprobó Vázquez, tras incidir en que "algún día" el Estatuto era "el fuero". "Pero hoy es el fuero y el huevo", concluyó, aludiendo así a que Galicia "depende económicamente" de este texto, ya que marca, entre otras cosas, el reparto de la financiación autonómica.

A mayores, preguntado sobre si la propuesta de la fundación Iniciativas 21 --impulsada por Emilio Pérez Touriño como laboratorio de ideas del PSdeG-- para la reforma del Estatuto sigue vigente, el dirigente socialista entendió que "todos los documentos" sirven como "punto de partida", pero apostó por "buscar acuerdos que sirvan a los tres grupos".