MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El portavoz de Esquerra Republicana (ERC) en el Congreso, Gabriel Rufián, vería "curioso" que el presidente de la Generalitat, Quim Torra, decidiese adelantar las elecciones catalanas después de haber encauzado los presupuestos de la comunidad, pero en todo caso ha exigido que se garantice que la mesa de diálogo sobre Cataluña pactada con el PSOE no se vea afectada por esa eventualidad.
En declaraciones en el Congreso, Rufián no ha querido profundizar sobre la conveniencia de adelantar o no las elecciones catalanas, pues considera "irresponsable e injusto" opinar desde el Congreso sin ser miembro del Govern, pero en todo caso sostiene que "resulta curioso que después de haber pactado la reforma fiscal con En Comú, lo que a su juicio supone "aprobar de facto unos presupuestos", se decidiese poner fin a la Legislatura.
"Pero es una potestad del presidente y si al final lo decide, día y hora", ha remachado, dejando claro que están preparados para cualquier decisión de Torra
Eso sí, en todo caso, ha querido dejar claro que esa posibilidad de adelantar las elecciones catalanas no debe afectar al proceso de diálogo pactado con el PSOE sobre la situación de Cataluña. "Que la mesa sea lo más impermeable a lo que pase fuera", ha sentenciado.
LA DEBILIDAD DEL PSOE HA ABIERTO UNA PUERTA QUE HAY QUE APROVECHAR
A su juicio, la "debilidad" parlamentaria del PSOE le ha "obligado a hablar con mucha gente" y ha abierto "la puerta al diálogo" para tratar de resolver el conflicto, y eso debe ser "independiente" de "la agenda catalana, española o internacional" y "aislarse de lo que pase fuera".
Rufían confía en que, tal y como se pactó con el PSOE, esa primera reunión de la mesa de diálogo se celebre a los 15 días de ponerse en marcha el Gobierno de Pedro Sánchez, lo que debería ocurrir antes del día 28, y celebra que desde Moncloa y desde la Generalitat estén ya buscando fecha para una reunión previa de los presidentes.
En su opinión, lo relevante es que las palabras de Sánchez y Torra de los últimos días "van en la línea de quererse reunir y eso marca un tiempo mejor", ya que hasta ahora "la gente, incluso el presidente Sánchez, de vanagloriaba de no hablar con nadie".
