PAMPLONA, 30 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Bomberos de la Agencia Navarra de Emergencias (ANE) continúa llevando a cabo labores de retén en las zonas afectadas por el incendio que se declaró el miércoles 22 de julio en la Sierra de Izaga para evitar posibles rebrotes del fuego, dadas las altas temperaturas que se han registrado esta última semana en Navarra y la ausencia de lluvias.
Durante la jornada de hoy, miembros del los parques comarcales de Sangüesa y Estella han continuado las labores en el concejo de Ardanaz (Izagaondoa) y desde que se originó el incendio, han participado aproximadamente 200 efectivos del parque central y de los parques comarcales de Burguete, Estella, Lodosa, Navascués, Sangüesa, Tafalla y Tudela, brigadas helitransportadas, bomberos voluntarios de Aoiz, 76 integrantes de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
También han colaborado técnicos del departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, agricultores, tres helicópteros del Gobierno de Navarra, una avioneta del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino y seis bulldozer (máquinas para hacer cortafuegos).
El incendio afectó a unas 900 hectáreas de extensión, según las primeras investigaciones del departamento de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, que sigue trabajando en la medición definitiva de la superficie y del tipo de terreno afectado por las llamas. Por su parte, la Policía Foral continúa investigando las causas del incendio, aunque la principal investigación apunta a que se originó por causas naturales (un rayo).
