PAMPLONA, 11 Dic. (EUROPA PRESS) -
Pamplona y su Comarca ha comenzado este sábado a recuperar la normalidad después de sufrir ayer viernes la mayor crecida del río Arga desde que hay registros, un sistema de medición que comenzó en el año 2000. El río Arga, a su paso por la capital navarra, llegó a alcanzar una altura de 4,80 metros con un caudal de 608,31 m3, según los datos del sistema de control de estaciones de aforo del Gobierno de Navarra.
Como comparativa, en las inundaciones de 2013 se midió un máximo de 492 m3 por segundo en el término municipal de Burlada.
En estos momentos todo el entramado urbano de Pamplona se encuentra abierto al tráfico, ha informado en su perfil de Twitter la Policía Municipal de Pamplona, que ha recomendado precaución por la posibilidad de suciedad en la calzada.
Desde primeras horas de la mañana, los servicios de limpieza recorren las calles para despejar de barro y suciedad las zonas que se vieron anegadas por el agua. A su vez, los vecinos se afanan también en las labores de limpieza y control de los daños en portales, garajes, locales y diferentes establecimientos que se han visto afectados por la crecida.
Según ha informado el Ayuntamiento de Pamplona, durante los próximos cuatro días, desde este sábado hasta el martes, Policía Municipal de Pamplona va a poner en marcha dos unidades móviles desde las que se ofrecerá a los vecinos de las zonas más afectadas por las inundaciones información y asesoramiento sobre la forma de reclamar los daños al Consorcio de Seguros. Se situarán en el Paseo Anelier de la Rochapea, en la campa junto al río Arga; y en la intersección de las calles A y B D del polígono de Landaben, y atenderán en horario de nueve de la mañana a dos de la tarde.
Además, durante este sábado tampoco estará en funcionamiento la zona azul en los barrios más afectados por las inundaciones, Rochapea y San Jorge.
