MADRID, 17 Feb. (EUROPA PRESS) -
Los valores de ozono inusualmente bajos registrados en la troposfera libre en el hemisferio norte y la disminución de las emisiones contaminantes se debieron a las restricciones impuestas para frenar el COVID-19, según ha concluido un estudio realizado en Alemania al que ha contribuido el Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus (CAMS).
Copernicus contribuyó al estudio impulsado por el servicio meteorológico alemán, Deutscher Wetterdienst, que ha sido publicado recientemente. El CAMS se implementa a través del Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio (CEPMPM) en representación de la Comisión Europea.
El subdirector del Servicio de Vigilancia Atmosférica de Copernicus, Richard Engelen, ha destacado que la pandemia del COVID-19 conllevó la implantación de medidas de confinamiento en todo el mundo, lo que repercutió considerablemente en el volumen de nuestras emisiones.
Así, ha añadido que la caída de la actividad de los sectores de transporte y aviación se tradujo en una menor quema de combustible y en una disminución de las emisiones liberadas a la atmósfera.
Esto, según explica, esta situación fomentó una reducción de las concentraciones de óxidos de nitrógeno, que constituyen los principales catalizadores de las reacciones fotoquímicas en la atmósfera. "La escasa concentración de óxidos de nitrógeno en la troposfera libre implicó una baja producción fotoquímica, lo que resultó en unos niveles de ozono inferiores", precisa.
Así, destaca que los datos de reanálisis del CAMS contribuyeron al estudio ya que mostraron que los reducidos valores de ozono registrados, con observaciones con globos sonda, no podían explicarse por variaciones interanuales en las condiciones meteorológicas, lo que llevó a la conclusión de que "el motivo principal seguramente fuese la disminución del volumen de emisiones".
Aunque el ozono desempeña un papel fundamental en la estratosfera para proteger la vida en la superficie de la Tierra de la peligrosa y dañina radiación ultravioleta, el que está presente en la troposfera es, sin embargo, una sustancia contaminante y uno de los principales gases de efecto invernadero.
Copernicus señala que lo ideal sería tener niveles elevados de ozono en la estratosfera y tan solo un volumen reducido en la troposfera. No obstante, las actividades humanas han dado lugar a la reducción del ozono estratosférico durante el último siglo y al aumento del ozono troposférico.
