SEVILLA, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Hermandad del Gran Poder de Sevilla ha iniciado los estudios y medidas para la instalación de una mampara de seguridad en torno a la talla del Cristo, obra del escultor Juan de Mesa, decisión tomada en Cabildo de Oficiales después del ataque que sufrió por parte de un funcionario de prisiones en la basílica de San Lorenzo, lo que valió al agresor su imputación en un delito de atentado contra el patrimonio histórico y su suspensión provisional de funciones por parte de Instituciones Penitenciarias.
El hermano mayor del Gran Poder, Enrique Esquivias, ha indicado a Europa Press que los técnicos trabajan ya 'in situ' pero que, sin embargo, la hermandad aún desconoce cuándo se podrá reinstaurar el besapiés diario, principal prioridad de la comunidad religiosa, ya que "no es un trabajo fácil, hay que ir al milímetro y hacerlo todo muy bien".
Según lo acordado, la mampara llegaría hasta los hombros de la imagen para proteger el pedestal y los laterales con barandillas --de una de las cuales se valió el agresor para apoyarse en su ataque--, siendo la mejor solución con vistas a la pronta normalización del culto, que Esquivias pretende que se produzca "lo antes posible", teniendo en cuenta factores como la refrigeración y la iluminación en la basílica.
El Cabildo ya resolvió en sesión extraordinaria no personarse en las diligencias incoadas en contra de este funcionario de prisiones por el Juzgado de Instrucción número 10, ratificando su total "colaboración" con la acción de la justicia. Al respecto, el hermano mayor del Gran Poder consideró que la mayor "gravedad" de los hechos es la relativa a los "efectos sobre los sentimientos y convicciones religiosas" de los feligreses y seguidores de la hermandad, dado que los desperfectos ocasionados en la talla son subsanables.
