Panaderos catalanes crean una réplica exacta del pan que se consumía en 1714

BARCELONA, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -

Panaderos catalanes han creado una réplica exacta del pan que se consumía en 1714 para conmemorar el Tricentenario con la voluntad de que el producto perdure y vuelva a elaborarse conservando la tradición de entonces.

El conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural de la Generalitat, Josep Maria Pelegrí, ha destacado este martes que este pan no sólo conmemora un hecho histórico, sino que sirve para recoger el legado: "Es un pan que nos persigue, existe y tiene vocación de futuro".

Este pan nace de la colaboración con el Tricentenario, el Govern y la Federación Catalana de Asociaciones de Gremios de Panaderos, cuyo presidente, Manel Llaràs, ha asegurado el éxito del producto porque cree que los consumidores se identificarán con él y servirá para dinamizar la actividad de las panaderías.

Se trata de un pan de unos 200 gramos de peso, elaborado con cinco cereales y harina catalana (Sunyer e Ylla) que requiere una larga fermentación y unos 50 minutos de cocción lenta, y se puede conservar durante más de una semana manteniendo su sabor.

INVESTIGACIÓN

Incorpora un dibujo realizado con harina en forma de cruz que recuerda a la moneda de la época, y para elaborarlo la Escuela del Gremio de Panaderos de Barcelona ha realizado una exhaustiva investigación de los cereales y los procesos de elaboración que se utilizaban siglos atrás.

Pelegrí ha hecho un llamamiento a todos los catalanes a consumir pan de las panaderías y, especialmente, este pan del Tricentenario, que se empezará a producir este mes en todos los hornos de Catalunya al precio que fije cada productor.

El conseller ha recordado que el pan es un elemento básico de la Dieta Mediterránea, y ha resaltado sus propiedades nutritivas así como la dedicación y el trabajo artesanal que implica este tipo de producto.

También ha asistido al acto el comisario del Tricentenario, Miquel Calçada, que ha sostenido que la creación de este pan refleja la voluntad de "querer romper con la idea de que el Tricentenario es una obsesión de unos cuantos", así como de acercarlo a la sociedad civil con diversos actos que tendrán lugar a lo largo del año.