ROMA, 2 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Papa ha lamentado que hoy en día sean más los cristianos perseguidos que en los primeros siglos del cristianismo y ha denunciado que existan todavía "catacumbas" en muchos países del mundo donde "está prohibido celebrar la eucaristía" y donde seguir a Cristo "es un crimen".
"Es la primera vez que estoy en una catacumba. Un lugar así da que pensar. Nos dice tantas cosas, podemos pensar en la vida de esta gente que tenía que esconderse y celebrar la eucaristía aquí dentro, un momento de historia fea. Pero hay que recordar que hoy también hay muchas catacumbas en otros países, tantos cristianos perseguidos. Más hoy que en el pasado", ha señalado el pontífice.
Francisco ha hecho estas reflexiones durante la misa que ha presidido en ocasión de la fiesta de todos los difuntos en las catacumbas de Priscila en Roma, uno de los cementerios romanos más antiguos que se han descubierto.
"Aún hoy hay tantas catacumbas en otros países donde hasta tienen que fingir que hacen una fiesta o un cumpleaños para celebrar una Eucaristía porque está prohibido celebrar", ha dicho el Papa.
Durante su homilía, el pontífice ha reflexionado sobre tres conceptos: la identidad, el lugar y la esperanza. Sobre la identidad, el Papa ha invitado a poner a las bienaventuranzas proclamadas como núcleo de la fe y de la existencia cristiana: "Sin esto no hay identidad. Fingimos ser cristianos".
Así ha señalado que la "identidad" de los primeros cristianos que se encontraban en las catacumbas para celebrar la eucaristía es la misma de "nuestros hermanos de hoy en tantos países donde ser cristiano es un crimen".
El Papa también ha destacado que "el lugar del cristiano está un poco por todos los sitios". Y ha especificado: "No tenemos un lugar privilegiado, algunos lo quieren tener quieren, son cristianos calificados y corren el riesgo de ser calificados y perder el cristiano. El lugar de los cristianos es ser la intercesión de Jesús en las manos de Dios".
De este modo ha preguntado: "¿Dónde me siento más seguro? ,¿en las manos de Dios o en otras cosas seguras que al final caerán porque no tienen consistencia?.
Por último ha destacado que los cristianos son, sobre todo, "hombres y mujeres de esperanza". "Nuestra esperanza está en el cielo", ha reseñado finalmente.
