MADRID, 13 Oct. (EUROPA PRESS) -
La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, reiteró hoy al Partido Popular su petición de consenso en materia migratoria y aseguró que el Gobierno "nunca cerrará las puertas" para el posible entendimiento en cuestiones que son de Estados.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, De la Vega reconoció que de momento el Ejecutivo cuenta con la voluntad del PP para participar en la subcomisión que se creará en el Congreso de los Diputados para abordar entre todos los partidos una política común.
De la Vega agradeció este gesto a los 'populares' y destacó que la creación de este órgano parlamentario supone "un paso muy importante para lograr un auténtica política común y de Estado" en la materia. Según dijo, los distintos grupos están "dispuestos a encontrar un punto de encuentro para construir entre todos una política común migratoria".
La vicepresidenta dijo que el único que se ha mostrado crítico "de forma abierta" es el PP, si bien no quiso polemizar con esta formación política desde la "posición de responsabilidad del Gobierno". "Todos los grupos han coincidió en que no se puede pedir una política común a la Unión Europea como dice Mariano Rajoy y no tenerla nosotros", apuntó.
En cualquier caso, De la Vega cree que todos los partidos políticos coinciden "mucho" y que "muchas cosas" que plantea el Partido Popular están recogidas en el documento de bases redactado para la puesta en marcha de la subcomisión. "Es positivo que en el Parlamento haya un lugar para un debate permanente y que haga propuestas", indicó.
De hecho, se mostró convencida de que entre todos los partidos se avanzará porque comparten que la inmigración es "un gran reto" que afecta a la convivencia al futuro, que es necesaria la llegada de extranjeros de manera ordenada, con derechos y obligaciones, y que se debe luchar contra la inmigración clandestina.
Por otra parte, se refirió a los acuerdos denominados 'de segunda generación' que firmó esta semana España con Gambia y Guinea Conakry y aseguró que van a resultar eficaces en la contención de la inmigración irregular, puesto que ligan la ayuda al desarrollo al cumplimiento de compromisos en materia migratoria, incluido las repatriaciones. Recordó que también contemplan la posibilidad de establecer cupos de inmigración legal.
Según De la Vega, a España "le urge contar con mano de obra pero se necesita que los inmigrantes trabajen a la luz, al margen de cualquier mercado clandestino, porque la economía sumergida nunca es fuente de riqueza sino de conflictos".
