HUELVA, 6 Jul. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Guardia Civil de Huelva han detenido a dos personas, uno de nacionalidad española y otro marroquí, como presuntos autores de un delito contra la salud pública y otro delito de contrabando, acusados de intentar introducir en la costa onubense 35 fardos de hachís que arrojaron un peso de más de 1.000 kilos de esa droga, concretamente en la playa de San Miguel, en el Rompido.
Los hechos sucedieron el miércoles a las 19.30 horas cuando en la citada playa y a plena luz de día tuvo lugar el intento de introducir el citado alijo de más de una tonelada de hachís, por parte de una embarcación que se aproximó hasta la costa, donde era esperada por un grupo de personas, según ha informado la Benemérita en una nota.
Se dio la circunstancia de que en el lugar se hallaba un guardia civil franco de servicio, que disfrutaba de un día playa, el cual, al observar la presencia de la embarcación y de diversas personas merodeando por la orilla, se puso en alerta.
Cuando finalmente comprobó que se estaban desembarcando una serie de fardos, similares a los utilizados en el narcotráfico, alertó vía telefónica a la Central COCS (062) de emergencias de la Guardia Civil, cuyos operadores alertaron a las patrullas más próximas al lugar.
Inmediatamente se presentaron diversas Unidades de la Guardia Civil, tanto de Cartaya, como de El Rompido, Lepe y Punta Umbría, consiguiendo interceptar a dos individuos y proceder a su detención.
Por parte de la Guardia Civil se han instruido las correspondientes diligencias, que han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de guardia de Ayamonte, a la vez se ha abierto una investigación tendente a esclarecer el caso.
