FERROL, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los vecinos de los bloques de Caranza afectados por los restos del huracán 'Gordon' en Ferrol continúan desalojados y luchando contra las inclemencias del tiempo, a las que se ha sumado la gran cantidad de agua caída en las últimas horas que ha anegado sus viviendas.
La lluvia ha afectado principalmente al bloque B, el de la derecha, que aún carece de servicios básicos y donde Dragados sigue trabajando en la impermeabilización de la superficie que tapaba el tejado que salió volando hace más de una semana.
Los afectados intentaron hasta las 4.00 horas hacer frente a la lluvia torrencial caída durante la noche de ayer con cubos, tinas y fregonas para intentar achicar el agua que había convertido el tejado en "una piscina" con el consiguiente riesgo de desplome. No obstante, los garajes ya se encuentran apuntalados para reforzar su estructura.
Germán Castro, presidente de la comunidad de vecinos, explica que tienen "la moral por los suelos" porque Dragados "no hace absolutamente nada" y el agua cae por las lámparas, las puertas ya no cierran debido a la humedad y el suelo de madera está abombado". Asimismo, apuntan que las escaleras parecen un río y se han convertido en un peligro.
Por su parte, los vecinos del otro bloque, cuya impermeabilización llevó a cabo la empresa Copasa, no cuentan con tales desperfectos aunque sí tienen goteras.
