La portavoz del Sindicat de Llogateres, Carme Arcarazo, ha negado que existan conversaciones entre la propiedad y los vecinos de Casa Orsola y ha pedido una negociación colectiva y con "garantías". "Tenemos 15 días hasta el siguiente lanzamiento de desahucio para negociar, para sentarnos a una mesa y llegar a un acuerdo", y ha puesto como condición que se retiren las órdenes de desahucio de algunos de los inquilinos.