El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha explicado este lunes que con las elecciones del pasado 26 de junio su formación ha cerrado un ciclo y debe afrontar ahora el desafío de "normalizarse" como partido político y dejar de ser una máquina de guerra electoral; un proceso que puede tener como consecuencia una victoria dentro de cuatro años, pero también "una hostia de proporciones bíblicas".