El PP se mantiene firme en su decisión de no "abrir el melón" de la reforma de la Constitución para sustituir el término 'disminuidos' por el de 'personas con discapacidad', y es que teme que otras formaciones políticas pretendan aprovechar la coyuntura para intentar plantear otras modificaciones de la Carta Magna de mayor envergadura y no se fía del PSOE dada su debilidad parlamentaria.