LOS ANGELES, 13 Jul. (EUROPA PRESS - Alba Porras) -
Lo ha vuelto a hacer. Recurriendo en exceso a tres tonos tan arriesgados como el negro, el dorado y el amarillo, la protagonista ha conseguido superar la prueba con sobresaliente. Una mirada recargada y profunda inspirada en la Natalie Portman más enigmática ha dado a la actriz otro motivo para encumbrarse como todo un icono de belleza.
Emma Watson nunca ha pecado de ostentosa a la hora de maquillarse sin embargo esta vez, uno de sus primeros saltos al vacío experimentando con tendencias punteras, ha sido todo un éxito.
Tomando como base la tenebrosa y penetrante fantasía del 'Cisne Negro', el negro ha sido el mejor aliado para este look. En el párpado superior ha utilizado sombra negra en textura de mousse para conseguir un acabado más compacto y potente.
Nada mejor que un jugar con la gama de color negro en degradé de dentro hacia fuera para conseguir esa apariencia gatuna y rasgada en la mirada. El toque glitter viene gracias al amarillo más flúor que aportan muchísima luz a la mirada aplicándolo en el lagrimal.
Si quieres multiplicar el efecto brillante, elige sombras con destellos o incluso un toque de purpurina para un efecto mágico.
Los ojos esa noche fueron los protagonistas indiscutibles de la noche, así que lo perfecto es, tal y como hizo Emma, no complicarse con el pelo y simplemente 'repeinar' su melenita pixi con un efecto wet como si llevase gomina.
