MADRID, 31 Mar. (CHANCE/SHEILA DOMINGO) -
Maribel Verdú regresa a España después de pasar varios meses en Argentina rodando su última película Felices 140, una historia que demuestra cómo el dinero puede corromperlo todo, incluso a la familia.
La actriz, que acaba de inaugurar la nueva 'boutique' de la firma de relojes Jaeger-LeCoultre, aterrizó en Madrid hace algunas semanas y ya está de nuevo inmersa en otro proyecto.
"Ahora estoy con una comedia, ya me hacía falta porque llevo ya muchos dramas" confiesa la actriz. Sin hijos, su próximo film, es una comedia sobre una mujer que no quiere tener hijos, "nada que ver conmigo, así que no me preguntéis", añade la actriz entre risas.
Desde hace años, la madrileña mantiene que no ha sido madre por una decisión propia. Pero eso no es comparable con su personaje, "una cosa es que no quiera tener hijos y otra que sea anti-niños como mi personaje", señala Verdú.
Casada desde hace dieciséis años con el productor Pedro Larrañaga, la actriz siempre ha presumido de vivir en una gran estabilidad matrimonial. "Adorarnos, querernos, pasárnoslo muy bien juntos y respetarnos, esa es la clave", confiesa. Junto al hijo del fallecido Carlos Larrañaga y la actriz María Luisa Merlo, forma una de la parejas más duraderas del cine español.
Verdú también puede hacer gala de su figura. A sus cuarenta y cuatro años acaba de protagonizar la portada del último número de la edición española de la revista Harper's Bazaar. Desnuda y bañada en oro, Maribel posa con total naturalidad evocando el poder del dinero, tema principal de la película que ha rodado en tierras argentinas, 'Felices 140'.
