MADRID, 4 Dic. (EUROPA PRESS) -
Jessica Bueno y Kiko Rivera viven sus momentos más dulces ejerciendo de padres primerizos. Mientras el hijo de Isabel Pantoja cumplía con sus compromisos profesionales en Madrid, la modelo se separaba de su hijo durante unas horas para acompañar a su madre, Loli, a las oficinas del INEM de la localidad sevillana de Utrera.
Después de varias semanas cuidando de su primer hijo, Kiko ha retomado sus compromisos como Dj, mientras que Jessica prepara su vuelta al trabajo como modelo. La sevillana ha perdido 13 kilos tras dar a luz, un logro que comentado en su Twitter publicando "Feliizz!! Hoy la báscula me ha dado los buenos días con 13 kilos menos. El post parto no es tan malo como pensaba".
Los resultados saltan a la vista y la modelo lucía tipo con un vestido corto negro, leggins y abrigo a juego, que realzaba su figura muy recuperada. Como complementos, eligió un sombrero borsalino, un fular de estampado geométrico y botas altas marrones.
Hace casi un mes que venía al mundo Francisco Rivera Bueno, el primer nieto de Isabel Pantoja. Aunque se preveía una exclusiva de por medio, la pareja apareció en las puertas del Hospital Sagrado Corazón de Sevilla con su primer hijo, radiantes de felicidad.
Madre e hija permanecieron en el interior de las oficinas de empleo durante un breve lapso de tiempo en que arreglaron algunos papeles y regresaron al domicilio donde esperaba el pequeño Francisco Rivera Bueno.
