MADRID, 25 Abr. (CHANCE) -
Stephen Belafonte salía sonriendo de la Corte de Los Ángeles tras lograr que el juez le concediera visitas a su hija, Madison, aunque serán supervisadas mientras se mantiene el proceso de divorcio con su ex mujer, Mel B.
El productor podrá ver a su pequeña de cinco años dos veces a la semana durante cuatro horas en el centro Ness Counseling de la ciudad californiana. Sin embargo, se mantiene la orden de alejamiento temporal solicitada por la cantante británica, tras acusarle de amenazas, abusos y maltrato durante su matrimonio.
"Estamos muy agradecidos y felices", dijo la abogada de Belafonte. La magistrada recordó a los reporteros que esta es una más de las muchas comparecencias que tendrá que llevar a cabo su cliente hasta obtener la custodia, su objetivo final. Sí se le negó las visitas a Grace Jamra, la hija que la ex Spice Girl tuvo con el actor y comediante Eddie Murphy, criada como si fuera una hija biológica más.
El abogado de Brown, Larry Bakman, argumentó en contra de la primera sentencia, alegando la existencia de evidencias que involucrarían a Belafonte en la filmación de películas pornográficas, además de permitir que un delincuente convicto entrara en la residencia familiar. El letrado recordó a la sala que lo más importante para su cliente es la seguridad de su hija. Explicaciones que no evitaron que Stephen pueda visitar a su hija, según las normas impuestas judicialmente.
