MADRID, 23 Ago. (CHANCE) -
La semana pasada por fin visualizábamos las impresionantes vacaciones de una de las parejas más mediáticas del mundo del corazón: Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa.
La pareja, que podría estar ya preparándose para pasar por el altar, ha hecho un viaje que sería digno de luna de miel y es que además de recorrer los Fiordos Noruegos y las Islas Griegas, se han relajado en una impresionante villa del Sudeste Asiático.
El Premio Nobel creía estar disfrutando de unos días de ensueño junto a Isabel en un paraíso exótico cuando todo se truncó a causa de un terrible episodio que sufrió el escritor y que el mismo ha relatado en su columna de El País.
El estado de salud de Vargas Llosa estuvo en peligro a causa de un ataque producido por un banco de medusas infinitesimales, que acribillaron sus brazos y su estómago dejando su cuerpo paralizado y flotando en el agua, tal y como narra el propio escritor: "Lo peor llegó por la noche. Unas manchas violáceas erupcionaron de repente en toda la piel afectada, acompañadas de una comezón feroz, inmisericorde, que fue aumentando por segundos hasta volverse irresistible".
Un gran susto para Isabel Preysler, que estuvo a su lado en todo momento. Pero sus cuidados no fueron suficientes, ya que el dolor producido por las picaduras era tan fuerte que Mario tuvo que trasladarse al hospital donde sintió ganas de que le amputasen los brazos: "Esa picazón me enloquecía y quería que la dermatóloga me la quitara aunque fuera amputándome los brazos. Le di una demostración práctica, rascándome delante de ella como un mono".
Afortunadamente el escritor se recuperó después de tres días de tratamiento y ahora se encuentra totalmente recuperado.
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