GRANADA, 29 May. (EUROPA PRESS) -
El Corte Inglés de Granada abrirá el lunes 1 de junio la totalidad de su superficie comercial, una vez que la provincia ha pasado a la fase 2 del plan de desescalada.
Los establecimientos de El Corte Inglés contarán con la totalidad de la oferta comercial aunque, conforme a la normativa establecida, tendrán un aforo limitado y será obligatorio el uso de mascarillas, según detalla la compañía en una nota.
Los profesionales de las distintas áreas y departamentos, que se han ido incorporando durante los días previos a la apertura, han puesto a punto la tienda para que el cliente encuentre todos los productos y servicios habituales que ofrece la empresa, la cual ha implantado medidas de seguridad tanto para sus empleados como para sus clientes.
Además de gel hidroalcohólico a la entrada y en diversos lugares del establecimiento, se han instalado vinilos en el suelo recordando la necesidad de guardar la distancia personal de dos metros, así como mamparas biológicas en cajas, puntos de información, mostradores con el fin de propiciar el distanciamiento entre las personas. También se ha instalado cartelería informado de los espacios, escaleras y accesos modificados temporalmente.
Se reservará el uso de ascensores a personas con movilidad reducida, con carritos de bebé o con carros de compra, y se limitará el número de ocupantes a una persona por cada dos metros cuadrados de superficie útil en la cabina.
Asimismo, habrá indicadores para informar en caso de que el aforo del centro o de la planta alcancen el máximo admisible, y personal de seguridad especializado realizará conteos periódicos de la ocupación de cada planta y sección, regulando los accesos si fuera necesario.
Entre otras medidas, los productos devueltos serán sometidos a higienización mediante centros de planchado de vapor DS-38, exposición a luz ultravioleta-C, u otras fórmulas acreditadas.
Las bolsas en las que el cliente devuelve las prendas serán destruidas y las perchas desinfectadas. Se mandendrá la distancia de seguridad en los probadores, y se organizará el espacio para formar una cola ordenada con distancia de dos metros. Además, un empleado controlará entradas y salidas limpiando cada cabina tras su uso. En joyería y gafas de sol, se limpiará el producto cada vez que un cliente se lo pruebe, entre otras medidas.
