GRANADA, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional han detenido en un establecimiento de compraventa de objetos de segunda mano, en Granada, a un hombre de 30 años por su presunta responsabilidad en la venta de dos cámaras de fotos robadas, valoradas en 3.600 euros. Las cámaras recuperadas, junto con otras --por valor total de 18.000 euros--, forman parte del botín obtenido en tres robos perpetrados en enero en comercios de Granada y Málaga por los que resultó detenida una pareja, que fue ingresada en prisión.
Concretamente, el pasado mes de febrero se detuvo a un hombre de 41 años y a una mujer de 49 cuando presuntamente robaban objetos de valor expuestos en las vitrinas de un establecimiento comercial de Granada. Esta pareja fue considerada presunta responsable de cometer un total de tres robos, dos de ellos en Granada y otro en Málaga, acontecidos durante el mes de enero y por los que la autoridad judicial dispuso su ingreso en prisión.
Además, en las mismas fechas, la mujer en solitario fue arrestada en Jaén durante una tentativa de robo en comercio en el que se empleó el mismo método, utilizando llaves falsas para abrir las cerraduras de las vitrinas expositoras y de esta forma se habrían apoderado de un botín total que asciende a los 18.000 euros.
Tras las detenciones, los agentes continuaron con las pesquisas centradas en la recuperación de los efectos sustraídos. En este sentido, el pasado viernes día 3, los investigadores localizaron en Granada a un hombre de 30 años cuando se disponía a vender una de las cámaras fotográficas que fueron sustraídas en enero en el establecimiento situado en Málaga.
En esta intervención, los agentes recuperaron dos de las cámaras sustraídas en la capital malagueña, valoradas en 3.600 euros. Una de ellas ya la había vendido el detenido en el comercio de compra venta de efectos de segunda mano donde fue arrestado y la otra estaba en pleno proceso de venta.
El detenido fue trasladado a dependencias de la Comisaría Provincial de Granada y ya ha sido puesto a disposición de la autoridad judicial; mientras que las cámaras de fotos se han devuelto al establecimiento donde fueron sustraídas.
