GRANADA, 17 May. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Montaña de la Guardia Civil ha realizado tres nuevos rescates en la provincia de Granada durante el fin de semana, los dos primeros en la Sierra de Castril y en Sierra Nevada, en relación a personas que iban caminado por la montaña, y el tercero en el paraje Boca de la Pescá del término municipal de Dílar, donde un hombre había sufrido un ictus.
En el primer caso, el Servicio de Emergencias de la Junta de Andalucía comunicó a la Guardia Civil a las 14,30 horas del sábado que dos personas se habían perdido en la Sierra de Castril, que estaban deshidratadas y agotadas y no podían continuar. La Guardia Civil envió a la zona al helicóptero con dos especialistas del Servicio de Montaña. Los agentes localizaron a las dos víctimas, les dieron agua y las evacuaron hasta una zona segura, donde las esperaba un familiar.
El segundo rescate tuvo lugar en los Lavaderos de la Reina, en Sierra Nevada, en el término municipal de Güéjar Sierra, también durante la tarde del sábado. Un montañero sufrió una caída y tuvo que ser evacuado por el helicóptero de la Guardia Civil hasta el hospital del PTS después de que los agentes del Servicio de Montaña consiguieran llegar hasta él, le inmovilizaran la pierna y lo trasladaran en camilla hasta la aeronave.
El tercer rescate tuvo lugar durante la tarde del domingo en el paraje Boca de la Pescá del término municipal de Dílar. Los guardias civiles del Sereim tuvieron que evacuar en helicóptero hasta el hospital del PTS a un hombre que al parecer había sufrido un ictus.
Estos tres rescates se realizaron a continuación del complicado rescate de un espeleólogo fallecido en una sima de difícil acceso en Riópar, en la provincia de Albacete. Cinco agentes de la Sección de Rescate e Intervención en Montaña de la Guardia Civil de Granada se desplazaron hasta Riópar para rescatar a un espeleólogo cuyo cadáver se encontraba atrapado a unos cuarenta metros de profundidad en una estrecha galería de una conocida sima.
Su actuación en el operativo resultó esencial, ya que dos de los agentes granadinos desplazados están especializados en el manejo de explosivos para realizar desobstrucciones mediante microvoladuras controladas, un recurso técnico absolutamente indispensable para realizar rescates en lugares angostos a los que resulta imposible acceder con la suficiente celeridad. La Guardia Civil es pionera en este tipo de rescates.
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