SEVILLA, 26 Oct. (EUROPA PRESS) -
El exministro de Economía y Hacienda y excomisario europeo Pedro Solbes ha manifestado este viernes que en su opinión "ninguna de las críticas" de la Comisión Europea (CE) será "tan potente" como para invalidar el borrador de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 que el Gobierno central ha enviado a Bruselas.
En declaraciones a los periodistas, tras inaugurar el VI Congreso de la Asociación Europea de Asesores Financieros de España (EFPA), Solbes ha apuntado que teniendo en cuenta la "reacción inicial" de Bruselas, su sensación es que habrá "algún comentario, con alguna crítica" pero, a su juicio, no invalidarán el proyecto de PGE inicial del Ejecutivo español.
Por otra parte, sobre la pugna entre Roma y Bruselas por los presupuestos italianos ha considerado que es un "choque de trenes" que espera que "no llegue a más" y ha recordado que "cumplir las obligaciones de la Unión Europea (UE) calma a los mercados".
En este sentido, ha asegurado que existe "una clara confrontación" entre el Gobierno italiano y la Comisión Europea, si bien ha añadido que "formalmente" se tienen que aprobar los documentos que se mandan desde Roma a Bruselas, aunque "no se está produciendo y no se va a producir por ahora". Así las cosas, ha dicho que las diferencias entre ambas instituciones lleva consigo una "cierta confrontación" que genera un impacto en los mercados.
"Bruselas lo que está diciendo es que llevamos años tomando decisiones para conseguir un sistema de gestión global mucho más eficiente, que implica obligaciones adicionales por parte de todos", ha manifestado y ha añadido que Italia "no puede ni debe echar para atrás este proceso".
Por último, el exministro de Economía y Hacienda y excomisario europeo se ha mostrado confiado en que este "choque de trenes no llegue a más" para que lleguen a "un cierto acuerdo".
Cabe recordar que la CE rechazó el pasado martes el plan presupuestario presentado por Italia, al constatar que se incumple significativamente las reglas fiscales europeas, por lo que ha reclamado a Roma un nuevo borrador en un plazo máximo de tres semanas, el martes 13 de noviembre.
