GIJÓN, 20 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Civil de Gijón ha identificado a tres personas a las que acusa de ser los causantes de incendios forestales en Piloña, Castrillón y Langreo. Los efectivos de la Benemérita les han tomado declaración en calidad de investigado -antiguo imputado-- como supuestos autores de un delito de incendio forestal.
Según una nota de prensa de la Comandancia de Gijón, sobre las 20.50 horas del pasado día 6, un agente de la Guardia Civil que circulaba en su vehículo particular por la carretera que une las localidades de Caldevilla y La Frecha, en el término municipal de Piloña, se percató de la existencia de un foco de incendio no muy lejos de la carretera por la que circulaba.
El agente, que no estaba de servicio en ese momento, se acercó al foco del fuego, a unos cien metros de la carretera, y observó a una persona salir de la zona quemada y dirigirse a un vehículo todo terreno que estaba estacionado en las inmediaciones. Una vez identificado, pasó aviso inmediato al Centro Operativo de Servicios de la Guardia Civil de Gijón y solicitó la presencia de una dotación de bomberos.
Se trata de un vecino de Arriondas-Parres (Asturias), de 40 años y cuya intención era supuestamente la regeneración de pastos. El incendio se saldó con un total de 1.000 metros cuadrados de monte bajo, no alcanzando mayores dimensiones gracias a la ausencia de viento y a la intervención del agente de la Guardia Civil.
En el transcurso de las posteriores investigaciones llevadas a cabo por el Servicio de Protección de la Naturaleza de Gijón, se pudo determinar la existencia de hasta 12 focos de inicio del fuego a ambos lados de la pista forestal.
Tan solo un día más tarde, hacia las 13.15 horas, personal de investigación de Incendios del Seprona de esta Comandancia de Gijón que se encontraba realizando un servicio preventivo debido a la activación del nivel de alerta 4 (muy alto), observaron una columna de humo de considerables dimensiones cuyo origen procedía de la localidad de Paerna (Langreo).
Una vez en el lugar, comprobaron que el foco estaba cercano a un invernadero y este, a su vez, próximo a una hilera de viviendas. Los efectivos consiguieron controlar el fuego con unas mangueras de agua hasta la llegada del Servicio de Bomberos.
QUEMA DE MOBILIARIO
En este caso, el incendio, que afectó a 5.500 m2 de prados y monte bajo, se originó por la quema de mobiliario viejo en las inmediaciones del domicilio de M.A.H.R., de 60 años, el cual adujo haberse despistado, de forma que se propagó el fuego y afectó incluso a la malla metálica de sujeción del talud de la AS-1. Tras tomársele declaración el pasado día 16 se dio cuenta del caso al Juzgado de Guardia de Langreo.
En cuanto al tercer incendio, este se inició a las 12.00 horas del pasado día 6, en el paraje de Linares-Naveces (Castrillón), y afectó a 3,87 hectáreas de eucalipto y monte bajo. En esta ocasión, una supuesta negligencia en los trabajos de tala de un monte hizo que en la caída de un eucalipto sobre el tendido eléctrico, lo que provocó el incendio. En su extinción participaron bomberos y varios helicópteros.
En este caso, tras el informe elaborado por La Brigada de Investigación de Incendios Forestales (BRIPA), se tomó declaración en calidad de investigados al responsable de la empresa y al operario de la máquina que provocó la caída del árbol, F.A.C.G., de 54 años, vecino de Avilés, y J.M.M.C. de 55 años y vecino de Pravia, respectivamente.
