OVIEDO, 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
La consejera de Derechos Sociales y Bienestar, Melania Álvarez, ha indicado este martes que el Principado ha recibido ya más de 3.500 solicitudes de ayuda al alquiler para personas afectadas económicamente por el COVID-19. Concretamente se registraron 3.883 solicitudes, de las que 350 de ellas estaban duplicadas por cuestiones relacionadas con los ajustes del propio sistema.
Asturias ha sido la primera comunidad en poner en marcha esta línea de apoyos. Estas ayudas se tramitan de forma telemática cubriendo un cuestionario y se podrán solicitar hasta el 30 de septiembre. Se abonarán en un único pago de 500 euros al mes que se abonará directamente al propietario de la vivienda.
Melania Álvarez ha manifestado, a preguntas de la oposición, que están estudiando como afrontar la posible problemática que podría generar la brecha digital a la hora de solicitar las ayudas, ya que únicamente se puede a través de la vía telemática.
"Si bien el primer día que se abrió el plazo de solicitudes se registraron mil y pico, las mismas fueran bajando hasta las 184 registradas el fin de semana", ha manifestado Álvarez que ha indicado que la saturación de la página web ya no es tal al bajar la presión, no obstante ha indicado que "habrá que valorar otras opciones al margen de la telemática".
En cuanto al pago de las mismas ha indicado que "pretenden hacer un procedimiento muy exprés y no hablaríamos más allá de un mes para el abono de estas ayudas". Ha manifestado además que en cuanto sea posible buscarán la forma de complementar estas ayudas para que puedan llegar a un mayor número de gente posible.
Sobre la posibilidad de ponerse en contacto con los propietarios de las viviendas, han explicado que "estudiarán la fórmula para poder informar a los propietarios de las viviendas de estas solicitudes", una tarea que a priori no resulta demasiado sencilla.
REFUERZO ADMINISTRACIONES LOCALES
Álvarez ha comparecido telemáticamente en el Grupo de Trabajo para el seguimiento y evaluación de la COVID-19 creado en la Junta General del Principado de Asturias. En su comparecencia ha indicado que están trabajando para agilizar los pagos y la gestión del Salario Social y de ese modo tratar de "desahogar a los ayuntamientos tratando de aliviar la presión que puedan sufrir en cuanto a la llegada de peticiones de ayudas urgentes" derivadas de la pandemia.
Así se ha comprometido a evitar o al menos aliviar a las administraciones locales la carga de las ayudas de emergencia mejorando la gestión y la agilidad de las prestaciones del Salario Social, donde "hay margen de mejora y de acortar los plazos".
Ha explicado que los expedientes del salario social básico y de las ayudas a la dependencia han aumentado un 6,5% desde la declaración del estado de alarma, hasta llegar a los 392 diarios. En este sentido, ha subrayado que, pese al aumento de la demanda y los ajustes de la plantilla impuestos por el teletrabajo, la gestión electrónica ha permitido mantener el ritmo de tramitación de la mayoría de los procedimientos, así como los objetivos del plan de choque para acabar con la lista de espera en el ámbito de la dependencia.
"Cuando llegamos a esta consejería asumimos un compromiso con la ciudadanía y, pese a esta crisis sobrevenida, nos mantenemos en los plazos previstos. No daremos ni un paso atrás ni escatimaremos esfuerzos en este ámbito", ha indicado Álvarez
Ha explicado que el 44% de los expedientes resueltos por la Administración autonómica desde el 1 de enero pertenecen a su departamento. La mayoría están relacionados con la gestión de ayudas a la dependencia y el salario social básico (59%), la valoración de discapacidad (32%) y las ayudas a la vivienda (8%). En concreto, en los primeros 17 días de este mes se han tramitado 5.090 expedientes de dependencia y salario social básico.
La consejera ha anunciado que reforzará con 30 empleados públicos más la plantilla que se encarga de la gestión y revisión de la renta mínima autonómica, lo que supondrá un gasto de 481.500 euros que se financiará con cargo al fondo COVID-19.
"De este modo, nos anticipamos para situarnos en el peor de los escenarios que podría producirse a partir de junio, con un incremento de la solicitudes de salario social básico del 100% y una media de 500 peticiones al mes, tal y como ocurrió en los momentos más delicados de la pasada crisis", ha señalado.
RESIDENCIAS DE MAYORES
En cuanto a las residencias de mayores, Melania Álvarez ha insistido en que en el inicio del estado de alarma se ajustaron y se pactaron las necesidades de personal para adecuarse a la situación y por lo tanto se dio respuesta a las necesidades para garantizar el buen servicio de los establecimientos residenciales.
También se ha incidido en que está previsto que esta semana se acaben de hacer todas las pruebas por PCR a la totalidad del personal de centros y se estudia reforzar en algunos casos de nuevo.
Álvarez ha incidido en que para su consejería las personas que hay en esas residencias son lo más importante y pensando en ellas se toma cada una de las decisiones.
"Lo que quiero dejar claro y con el lamento de quienes han perdido la vida, nosotros siempre hemos aplicado los protocolos que en ese momento nos indicaban quienes saben", ha manifestado la consejera.
PERSONAS SIN RECURSOS
También se ha referido a la atención prestada a las personas sin hogar de la región. Álvarez ha exlicado que en el centro de la Tejerona, con capacidad para 90 personas, hay ahora mismo 58 ocupantes.
Melania Álvarez ha indicado que este centro habilitado en ningún momento completó el aforo y nunca se pasó de las 70 personas para poder ofrecer siempre la atención óptima a los usuarios. La consejera ha destacado el papel de Cruz Roja, Protección CIvil y demás colectivos que llevan a cabo un gran trabajo para poder atender a los más vulnerables, en este caso a las personas sin hogar.
DECRETO DE MANDOS DEL ERA
Sobre la tramitación del Decreto que modifica el organigrama del ERA para crear una nueva área sociosanitariaque, Álvarez ha indicado que es una decisión y un proceso que venía ya de antes de la crisis provocada por la pandemia y que siga su curso y llegue a buen puerto incidirá en beneficio de las personas que viven en las residencias y que trabajan en el ERA porque responde a un cambio de modelo para mejorar el organismo.
