SANTANDER, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
El publicista Pablo Purón y el ingeniero de Caminos Rubén Martín, fundadores del colectivo de artistas 'Boamistura', han destacado este martes en Santander el papel del arte urbano como "herramienta de cambio positivo" en el ámbito del espacio público.
"Se puede cambiar el aspecto de una zona y la percepción que la gente tiene de ella", señaló Martín para explicar cómo las intervenciones artísticas en el ámbito urbano contribuyen a "recuperar espacios degradados" para el uso común y a "mejorar la convivencia" entre los ciudadanos.
Así lo afirmaron durante una rueda de prensa celebrada en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP) con motivo de su participación en el seminario 'El eslabón perdido entre la planificación y el proyecto arquitectónico', en la que también intervino el arquitecto y el director del curso, Jerónimo Junquera.
Martín explicó que desde el colectivo 'Boamistura' -integrado por cinco jóvenes artistas multidisciplinares- han llevado a cabo distintos proyectos en países como Noruega, Brasil y Sudáfrica, los dos últimos, de carácter "social", aseguró el ingeniero. "Buscamos que la gente se involucre en el proceso para lograr un efecto más positivo", subrayó el artista, quien apuntó que de esta manera los habitantes se sienten "orgullosos" de haber cambiado el aspecto del lugar donde viven.
Por su parte, Purón lamentó que las autoridades políticas no presten la "suficiente" atención a este tipo de acciones e "incluso" pongan trabas a su realización. "Nos resulta más fácil hacer un proyecto en Brasil que en Madrid", criticó el publicista, quien añadió que en España "todo se pierde en un mar de burocracia" y cualquier acción en la calle "se convierte en ilegal".
"RECUPERAR LA CALLE"
En este sentido, Junquera comentó que existe un "problema de conexión" entre quienes se dedican a investigar el espacio público, como artistas o arquitectos, y los políticos, de quienes dijo que "cada vez se distancian más de los ciudadanos y son esclavos de sus argumentarios".
El arquitecto apostó por "recuperar la calle" para las personas y denunció que el desarrollo urbanístico de las ciudades se ha convertido en un "negocio inmobiliario". "Hay que ocuparse más del espacio que se genera al construir que de los propios edificios", manifestó.
Junquera hizo hincapié en la necesidad de encontrar las "claves" de la ciudad moderna, en la que, a su juicio, "se han perdido las esencias y la gente ya no vive en comunidad". Para ello, señaló que hay que "tomar como objetivo que los niños puedan jugar en la calle", porque a partir de ahí "se obtiene todo lo demás".
"El espacio urbano debe ser para las personas", manifestó el arquitecto, quien propuso, entre otras medidas, la creación de un "carril-coche" para limitar el uso de vehículos privados y el fomento del uso de medios de transporte como la bicicleta.
