SANTANDER, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Papa Francisco ha nombrado al obispo de Santander, monseñor Vicente Jiménez Zamora, miembro de la Congregación vaticana para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.
Igualmente, han sido designados para esta Congregación al recién elegido presidente de la Conferencia Episcopal Española, Ricardo Blázquez, y al Obispo de Tarazona, Eusebio Hernández Sola.
El nombramiento de Jiménez Zamora es compatible con el oficio de Obispo de la Diócesis de Santander, de la que seguirá al frente. Asimismo, continuará presidiendo, en la Conferencia Episcopal Española (CEE), la también Comisión para la Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica, tal y como informa el Obispado en nota de prensa.
El obispo de Santander fue reelegido para este cargo el pasado día 13 de marzo en el transcurso de la 103 Asamblea Plenaria que la CEE celebró en Madrid. Con este nombramiento, Jiménez prolongaba un nuevo período de tres años al frente de esta Comisión episcopal.
El cargo lleva implícito, además, formar también parte de la Comisión Permanente de la CEE, órgano que cuida de la preparación de las Asambleas Plenarias y de la ejecución de las decisiones adoptadas en ellas.
El prelado resaltó entonces su disposición a seguir trabajando "con ánimo" en esta área porque "esa ha sido, además, la voluntad de mis hermanos obispos".
El cometido de la Comisión Episcopal de la Vida Consagrada de la CEE es el de tutelar esta forma de vida en el seno de la Iglesia a través de sus diversas manifestaciones, como son los Institutos de vida consagrada, Sociedades de vida apostólica, vida eremita, vírgenes consagradas, así como las relativas a asociaciones, nuevas formas de vida consagrada, asociaciones de fieles erigidas con el fin de convertirse en Institutos de vida consagrada o Sociedades de vida apostólica.
Asimismo, es competencia de esta Comisión organizar las anuales Jornadas Eclesiales de la Vida Consagrada (2 de febrero) y del día Pro Orantibus (domingo de la Santísima Trinidad). En su seno, se celebran reuniones periódicas con vicarios y delegados episcopales para la vida consagrada, así como con superiores y superioras de comunidades monásticas.
