Desciende un 27% el número de hogares cántabros que creen que la situación económica empeorará

Familia
CRISS
Actualizado: lunes, 24 octubre 2011 15:22

El Instituto Cántabro de Estadística ha publicado la Encuesta Social de Cantabria 2011

SANTANDER, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -

El Instituto Cántabro de Estadística ha publicado la Encuesta Social de Cantabria 2011. Un estudio que revela que el número de hogares en los que se prevé que la situación económica empeore en 2012 ha descendido un 27% respecto al año pasado.

La Encuesta analiza la opinión de los ciudadanos en ocho áreas temáticas: renta económica, laboral, sociopolítica, hábitos, interculturalidad, vivienda, salud y medio ambiente. El estudio, que ofrece una visión global de las condiciones de vida en la comunidad autónoma, tiene rango de operación estadística oficial de acuerdo con el Decreto por el que se aprueba el Programa Anual de Estadística 2011, del Plan Estadístico 2009-2011.

El informe señala que los ingresos medios mensuales de los hogares de Cantabria se mantienen en los 1.700 euros y con una distribución parecida a la de años anteriores.

Destaca, únicamente, el ligero descenso de los tramos de ingresos más altos, con más de 3.000 euros, que pasan del 10'2% al 8'4%. La mayoría de ellos provienen del trabajo, un 74%, y de las prestaciones contributivas, un 36%, no apreciándose diferencias marcadas entre encuestas anteriores y la de 2011.

A su vez, el gasto medio de los hogares en el pago de la hipoteca se ha incrementado en un 12%, entre la encuesta de 2010 y de 2011, pasando de 643 a 722 euros. Mientras, el gasto medio mensual en otros préstamos se mantiene en unos 250 euros.

Respecto al bienestar de los hogares, en el último año se ha producido un aumento en la capacidad de ahorro, estimada en un 11%, respecto a 2010. Sin embargo, los hogares que han sufrido retrasos en los pagos se han incrementado un 20%.

Por otro lado, parece que el aumento en la capacidad de ahorro ha permitido que un 2% más de los hogares puedan hacer frente a gastos imprevistos y costearse una semana de vacaciones.

Respecto de la capacidad de llegar a fin de mes, la situación ha mejorado respecto al año anterior. Así, el número de hogares que tienen dificultades baja un 11%, destacando que aquellos que presentaban grandes dificultades en 2010 descienden un 13% en 2011.

Y en relación a la situación laboral de los miembros del hogar, el número de hogares con todos sus miembros trabajando aumenta un 9%. Sin embargo, el mayor crecimiento se detecta en aquellos hogares con todos sus miembros en paro, que aumentan un 18%, representando casi el 2% del total de hogares de la región.

Por otro lado, los hogares que tienen al menos un miembro desempleado crecen un 3'5%, descendiendo únicamente aquellos en los que al menos un miembro trabaja, reflejando en este punto una caída del 1%. Destaca el informe que este tipo de hogar es el más importante de la región, ya que representa el 75% del total de los hogares de Cantabria.

Y en los hogares con miembros desempleados destaca el fuerte aumento de aquellos en los que los parados no cobran prestación, con un aumento de un 24% en esta tipología. Esto supone que más del 50% de los hogares con parados no reciben prestación por desempleo. De esta manera, el 13% de los hogares de Cantabria tienen entre sus miembros desempleados que no reciben la prestación por desempleo.

En líneas generales, la mayoría de hogares de Cantabria cree que su situación es similar a la del año anterior y que dentro de un año también será parecida, con un 53%. Por otro lado, destaca que el porcentaje de hogares en los que se cree que la situación empeorará ha descendido un 27%.

A pesar de todo ello, el porcentaje de hogares que han sufrido dificultades económicas ha aumentado entre 2010 y 2011, pasando del 22% al 25%, con un crecimiento total del 9%.

En estos hogares las principales medidas adoptadas han consistido en reducir los gastos (85%), solicitar ayudas a familiares (11%) y pedir préstamos o créditos (10%). Sin embargo, las medidas tomadas que más han aumentado durante 2011 han sido la liquidación de inversiones (acciones, planes de pensiones, vivienda, patrimonio, etc.), a las que recurrieron un 46% más de los hogares, y la solicitud de ayudas de carácter social, con un 20% más de hogares.

DATOS LABORALES

Los resultados de la Encuesta Social de Cantabria 2011, respecto a la situación laboral de los cántabros, establecen que el 58% de la población de 16 y más años es activa, aumentando 2 puntos porcentuales respecto a la cifra de 2010 (56%).

Este aumento es consecuencia de una mayor incorporación de la mujer al mercado laboral, ya que la población activa femenina ha aumentado del 46% de 2010, al 50% de 2011, mientras la masculina se ha mantenido prácticamente constante.

El porcentaje de población en paro es similar al del año anterior, 10'37% en 2010 y 10'93% en 2011, aumentando en el caso de las mujeres del 9'21% al 10'22% y permaneciendo en las mismas cifras en el caso de los hombres, 11'60 % y 11'68%.

Respecto a la población desempleada y al tiempo que los encuestados llevan en esa situación, al eliminar el factor "no" en las respuesta y teniendo, por tanto, únicamente en cuenta a aquellos que contestaron a la pregunta, se observa un incremento de los parados de larga duración. Es decir, aquellos que llevan sin trabajo más de dos años, que alcanzan en 2011 el 28% de las contestaciones, frente al 13% de 2010.

En relación al mercado laboral de la región, las opiniones no han cambiado de manera significativa, reproduciéndose los patrones de años anteriores. En este aspecto, los encuestados ven muchas dificultades en los dos supuestos planteados: un cambio de puesto de trabajo de similares características o mejores y el comienzo de un nuevo negocio.

Igualmente, la foto fija desprendida de sus opiniones refleja que los cántabros creen mayoritariamente que en la región los puestos ofrecidos no son principalmente cualificados; que para poder encontrar un buen trabajo se ha de ir fuera; que los contratos que se ofrecen no son estables; que el contar con relaciones personales sigue siendo una ayuda a la hora de encontrar trabajo, aunque cada vez en menor medida, y que el comenzar uno su propio negocio no se ve como solución al desempleo.

La encuesta también ha preguntado sobre la perspectiva que los ciudadanos tienen sobre el futuro de la región, destacando que en 2011, por primera vez en los últimos años, 2009 y 2010, desciende la proporción de cántabros que creen que la situación empeorará en los próximos cinco años. De esta manera, si en 2010 el 32% de la población creía que empeoraría algo o mucho, en 2011 este porcentaje desciende al 19%, creyendo que mejorará algo o mucho un 38% (31% en 2010).