El acuerdo absuelve a dos acusados de pertenecer a la red de traficantes
SANTANDER, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Cantabria ratificará por sentencia los 25 años y medio de prisión conjunta para ocho ciudadanos dominicanos por pertenecer a una red que traficaba con drogas, principalmente en Torrelavega y en clubes de alterne, con mercancía proveniente de Asturias y País Vasco.
El presidente de la Sala, Javier de la Hoz, expuso que una vez los ocho acusados se reconocieron autores de los hechos, se dictará sentencia "en los mismos términos" que el acuerdo alcanzado por las partes, que fue ratificado en Sala a las 11.40 horas.
Así, los procesados Socorro T.G. y Magdalena Elisabeth C.C. cumplirán una condena, respectivamente, de cuatro años de cárcel y multa de 25.000 euros, mientras que para Rafael R.S. la sentencia será de 3 años y medio, además de los 25.000 euros, por aplicársele la atenuante de drogadicción.
Por su parte, Cipriano D.M., José Alejandro T.C., Sergio G.M. y Luis Tomás C.P. cumplirán por sentencia tres años de cárcel y multa de 15.000 euros, mientras que Sugeiry Margarita A.D. será condenada a dos años de prisión e idéntica multa que los anteriores.
Por último, en el acuerdo la fiscal retiró los cargos contra Vanessa D. DF. y Samuel A.D., para quienes inicialmente el Ministerio Público pedía cuatro años de prisión.
Los ocho procesados se declararon culpables, mostrándose de acuerdo con las condenas y con los hechos, por lo que no se celebró el juicio, convocado inicialmente para cuatro sesiones.
Los hechos se remiten al año 2005, cuando los procesados traficaban con droga proveniente del País Vasco y de la localidad asturiana de Llanes, droga que ponían en circulación en el área de Torrelavega y en clubes de alterne que regentaba la madre de uno de los acusados.
Así, el procesado Socorro T.G, de 30 años y considerado el 'cabecilla', y su compañera sentimental Sugeiry A.D., se dedicaban a la venta de cocaína y hachís desde su domicilio, situado en Torrelavega, donde también residía otro procesado, José Alejandro, quien cooperaba en las tareas de venta haciendo entregas por encargo del primero.
Socorro T.G., a su vez, depositaba habitualmente en el domicilio de otro de los procesados, Luis Tomás C.P., la droga destinada a la venta y que éste trasladaba a los lugares que el primero le indicaba.
El cabecilla de la red se desplazaba a Asturias en un vehículo propiedad de otro acusado, Cipriano D.M., quien a su vez efectuaba otros viajes para el cobro de cantidades derivadas de las distintas operaciones de venta de estupefacientes.
Finalmente, Magdalena C.C. y Sergio G.M., quienes compartían domicilio en Torrelavega, se dedicaban habitualmente a la venta de sustancias estupefacientes, contactando habitualmente con Socorro T.G. y su compañera, para facilitarse mutuamente las drogas.
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