Es una de las medidas del plan de choque diseñado por el PP para dar salida a los 317.000 metros cuadrados vacíos a día de hoy
SANTANDER, 16 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Cantabria reducirá entre un 15 y un 30% el precio del suelo industrial para hacerlo "más atractivo". Esta es una de las principales medidas del plan de choque diseñado por la Consejería de Industria para favorecer la implantación de nuevas empresas y dar así salida a los 300.000 metros cuadrados de suelo urbanizado que se encuentra inutilizado a día de hoy en Cantabria, a los que hay que sumar otros 17.000 en naves, y cuyo precio está "muy por encima del que el empresariado está dispuesto a pagar".
El asesoramiento personalizado a las empresas para facilitar su asentamiento en este suelo, la flexibilización de plazos y condiciones contractuales y la puesta en marcha de un plan de promoción comercial en Cantabria y en las regiones limítrofes, son también medidas previstas en este plan presentado este viernes en rueda de prensa por el presidente regional, Ignacio Diego, y el consejero de Industria, Eduardo Arasti.
Este plan se dirige fundamentalmente a los parques empresariales de Tanos-Viérnoles, Besaya y Alto Asón, donde la rebaja en el precio de venta -de un 15 a un 30%- se establecerá en función del empleo y la inversión que se genere y en el caso del Alto Asón podría llegar a un 40%. Según explicó Diego, el coste de este plan se ciñe a lo que el Gobierno dejará de ingresar al reducir el precio del metro cuadrado, una "pérdida" que se cuantifica en 4,3 millones de euros.
Según explicó, paralelamente a la puesta en marcha de este plan el Gobierno "va a seguir trabajando para que Cantabria tenga más suelo". Según sus estimaciones, a finales de marzo o principales de abril el Consejo de Gobierno aprobará el PSIR de Valdeolea.
Además, la Consejería está trabajando con los Ayuntamientos de Corrales y San Felices para "hacer avanzar" el PSIR de Buelna; con la SEPI para reactivar el suelo industrial de Villaescusa-Parbayón; y con el Ayuntamiento de Camargo y dos iniciativas privadas para configurar un "gran parque empresarial" en Revilla, a través de un PSIR, en un suelo que "en buena parte está degradadado" y que se va a recuperar para darle utilidad.
"Queremos trabajar también el suelo de La Pasiega, que es estratégico. Y también estamos poniendo los ojos en otro suelo industrial abandonado, en Molledo, después de la quiebra de Hilaturas Portolín, que vamos a intentar recuperar", añadió el presidente, quien indicó que las instalaciones de Haulotte también se sumarían a esta oferta de suelo industrial si como "todo parece indicar", se consuma la deslocalización de la firma.
OFERTA "POCO ATRACTIVA"
Diego comenzó la presentación del plan aludiendo a los 11 millones de metros cuadrados de suelo industrial que prometió el anterior Gobierno, de los que actualmente se han vendido 900.000, "no llega al 10%". "Buena intención, enorme fracaso", opinó el presidente.
Según el "diagnóstico" de situación realizado por la Consejería de Industria, la oferta de suelo industrial "no es atractiva", por un lado porque el precio "no es competitivo" respecto a las comunidades autónomas limítrofes; por las "fuertes restricciones y poco flexibilidad" de los contratos; por problemas en las tramitaciones municipales; y por la ausencia de promoción comercial por parte del Gobierno del suelo industrial disponible, además de la coyuntura económica y la ausencia de liquidez.
El presidente ha destacado la interrelación de este plan de choque con otras medidas ya anunciadas por el Gobierno como el Plan Innpulsa y los mecanismos de financiación del ICAF y Sogarca.
Además, ha puntualizado que el plan se basa en la cooperación y coordinación con los agentes implicados, especialmente el sector empresarial (CEOE, Cámara de Comercio, Jóvenes Empresarios, etc.) y con los Ayuntamientos, a los que el Gobierno va a invitar a sumarse articulando bonificaciones de tasas o licencias o precios especiales en el IBI durante los primeros años de asentamiento de la empresa en función de la creación de empleo.
Para hacer la oferta "más atractiva", junto a las rebajas en el precio de venta también se aplicará un descuento del 25% en el alquiler de naves, con un precio de tres euros por metro cuadrado que podrá ser incluso de 1,5 euros en el caso de emprendedores y empresas de nueva creación que cumplan una serie de requisitos.
A ello se une la posibilidad de ejecutar proyectos llave en mano con compraventa, alquiler o alquiler con opción a compra, así como la flexibilización de las condiciones contractuales, con prórrogas justificadas para construir más allá del plazo de dos años que se exige en la actualidad, y rebaja de 15 a 10 años en el plazo a partir del cual las empresas pueden disponer libremente del suelo.
Por otro lado, se creará una unidad específica en la empresa pública Sican (Suelo Industrial de Cantabria), con personal ya existente, para asesorar y apoyar a las empresas en todo el proceso, y se pondrá en marcha un plan comercial, con una dotación de 500.000 euros para el periodo 2012-2013 y una oficina comercial atendida también por personal de Sican.
TANOS-VIERNOLES, BESAYA Y ALTO ASÓN
Según explicó Arasti, el parque empresarial Tanos-Viérnoles tiene en la actualidad 111 hectáreas disponibles (17 para naves industriales, 68 en suelo industrial y 26 en suelo dotacional); el parque empresarial Besaya, tiene 70 hectáreas disponibles (47 de suelo industrial, seis de suelo comercial y 17 ocupadas por 58 naves modulares); y el del Alto Asón, 83,5 hectáreas de suelo industrial.
Diego afirmó que el parque empresarial del Alto Asón presenta un nivel "muy bajo" de ocupación pese a que se inició en los últimos años del anterior Gobierno del PP y de hecho "todavía no se ha inaugurado formalmente".
Añadió que el parque empresarial del Besaya, que presenta una ocupación media-alta, arrancó con un PSIR también aprobado por el anterior Gobierno del PP, y "se paralizó durante años" porque el Gobierno PRC-PSOE puso en marcha el polígono Tanos-Viérnoles, un proyecto "100% del Gobierno anterior", que lo inauguró estando las naves en situación "ilegal" porque el suelo no había sido recepcionado por el Ayuntamiento, y que en la actualidad presenta una ocupación "media".
Diego explicó que las 300 hectáreas de suelo disponible y listo para utilizar "mañana mismo" le generan al Gobierno gastos financieros y de mantenimiento, pero "el más difícil" de sobrellevar, dijo, es el de ver ese suelo ocioso.
