Por un ordenador que nunca llegó a entregarse
SANTANDER, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Penal número 4 de Santander ha condenado a un año de prisión por un delito de estafa a R.V.V. por quedarse con el dinero que había pedido que le adelantara otra persona con la que había contactado a través de Internet para venderle un ordenador que nunca fue a parar al comprador.
En noviembre de 2006, el condenado puso un anuncio en una conocida Web de anuncios de intercambios y compras de segunda mano, en la que ponía a la venta un ordenador portátil.
Otra persona mostró su interés, y se intercambiaron varios correos electrónicos, en los que el vendedor le indicó que para enviarle el ordenador, el comprador debía previamente ingresarle en su cuenta bancaria 1.300 euros.
Este así lo hizo, pero el tiempo pasaba y el ordenador nunca llegó, pese a sus reiteradas peticiones, a las que respondía asegurando que le habían borrado los correos electrónicos accediendo a su dirección, o que padecía una depresión y problemas económicos.
En realidad, el acusado nunca tuvo intención de entregarlo, y de hecho, en la sentencia se afirma que se desconoce incluso si el ordenador existía de verdad.
Además de la condenada de prisión, deberá devolver al estafado los 1.300 euros que este le ingresó en su cuenta.
