Los caminos y sendas del litoral estarán adaptados a personas con minusvalía y tendrán paneles en braille

EP

SANTANDER, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

Todos los caminos y sendas previstos en el Plan Especial de Sendas y Caminos del Litoral de Cantabria estarán adaptados para personas con algún tipo de minusvalía e incluso contarán con paneles en braille.

Así lo recoge dicho plan que, según destaca la Consejería de Obras Públicas, Ordenación del Territorio, Vivienda y Urbanismo, es una de las actuaciones "más relevantes" de las desarrolladas por este departamento dentro de la Dirección General de Ordenación del Territorio y Evaluación Ambiental Paisajística, debido al gran uso que de ella pueden hacer todos los ciudadanos.

Al respecto, y según la información de la Consejería, consultada por Europa Press, el éxito de este tipo de rutas radica en la posibilidad de adaptar la elección de los recorridos al estado físico de cada usuario; y en la garantía de caminar por lugares seguros y señalizados, con lo que se establece una seguridad tanto para familias con niños pequeños como para senderistas individuales o personas con algún tipo de minusvalía.

Este Plan tiene como objetivo la creación, en los 35 municipios costeros de Cantabria, y su más cercana zona de influencia, de un entramado de sendas y caminos que conformará una malla de 600 kilómetros.

Junto con un punto de partida que establece actuaciones "rigurosas" de protección ambiental, el PESC tiene como finalidad acercar el litoral de Cantabria a las cada vez más numerosas personas que desean salir de los entornos urbanos y optan por el senderismo como una actividad prioritaria en su ocio.

DOS CATEGORÍAS

El entramado de sendas y caminos previstos en el Plan, incluye a Cantabria dentro de las regiones europeas que cuentan con los denominados Grandes Recorridos (GR), nombre con el que se designan los senderos de una Red Europea de Caminos, presente principalmente en Francia, España, Bélgica, y Países Bajos.

El Plan Especial diferencia el entramado de recorridos costeros en dos categorías, que son el Gran Recorrido Litoral (GRL) y los Pequeños Recorridos Litorales (PRL).

La extensión kilométrica de uno y otro supone un criterio básico para su distinción. Así, mientras que para la realización completa del GRL, se requiere un mayor número de jornadas, que se estiman en cinco o seis días, los PRL nunca superan los cincuenta kilómetros y pueden hacerse en una sola jornada o menos.