SANTANDER, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
El consumo de cigarrillos sigue cayendo en Cantabria, con un descenso acumulado del 8,22 por ciento en los ocho primeros meses del año. En el lado opuesto, se mantiene la senda creciente de otros tipos de tabaco, en especial el de liar, que en ese tiempo ha aumentado casi un 65 por ciento sus ventas con respecto al mismo periodo del pasado año.
De todas maneras, los cigarrillos siguen liderando el consumo de tabaco, a gran distancia de los cigarros (puros) y el tabaco para pipa y para liar, y su recaudación crece pese al descenso de las ventas, debido a las subidas de precios. Así se observa en los últimos datos del Comisionado para el Mercado de Tabacos.
Según esos datos, recogidos por Europa Press, hasta finales del mes de agosto se vendieron en la región más de 33,2 millones de cajetillas de cigarrillos, frente a los más de 36,2 millones del mismo periodo de 2009, lo que supone un descenso del 8,22 por ciento.
No obstante, la recaudación subió un 6,7 por ciento, pasando de unos 102,2 millones de euros recaudados de enero a agosto de 2009, a más de 109 millones en las mismas fechas de este ejercicio.
En total, el importe de las ventas de tabaco en Cantabria (sumados cigarrillos, puros, tabaco para liar y para pipa) creció hasta finales de agosto un 8 por ciento, situándose cerca de 118 millones de euros, 8,7 millones más que en los ocho primeros meses de 2009.
Las ventas de cigarrillos siguen siendo las más destacadas. Los 33,2 millones de cajetillas (de 20 unidades) vendidas suponen un desembolso de 109.118.758 euros.
A continuación se sitúan las ventas de puros, con 19 millones de unidades vendidas (un 32,5% más que un año antes), lo que se ha traducido en una recaudación cercana a 5,7 millones de euros (un 7,5 por ciento más).
Por su parte, de tabaco para liar se vendieron hasta agosto 31.279 kilos (un 65,3% más que en el mismo periodo de 2009), por importe superior a 2,7 millones de euros (+115%).
Y por lo que respecta al tabaco para pipa, aumentó también su consumo, pasando de 787 a 1.217 kilos, una subida en torno al 55 por ciento, que en términos económicos se plasmó en un aumento del 45 por ciento, al pasar de unos 49.100 euros en los ocho primeros meses de 2009, a más de 71.200 euros en el mismo tiempo en 2010.
