SANTANDER, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -
La coordinadora de la Cátedra UNESCO de Políticas Culturales y Cooperación de la Universitat de Girona, Gemma Carbó, afirmó hoy en Santander que el modelo escolar "está explotando" porque se enfrenta a un contexto globalizado que lo supera. En este sentido, recomendó la "vía del diálogo intercultural frente a la de la asimilación" para corregir esta situación.
En el modelo francés, el de asimilación, el individuo se integra en las formas culturales del país que lo adopta, mientras que en el del diálogo se aprende a partir de la diversidad. Por ello, aseveró que esta opción "también es un recurso de crecimiento, creatividad e innovación".
Carbó, quien participó en el curso `Formas de expresión y creaciones propias: la competencia cultural y artística' organizado por la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), aseguró que, para desarrollar este modelo, la escuela "tendrá que cambiar" ya que "las necesidades son otras". "Hay que pensar en integrar otras formas de contar y aprender", añadió.
La coordinadora de la Cátedra UNESCO destacó como una "cuestión fundamental" el fenómeno de la sociedad en red, una realidad que, en su opinión, hace que la educación tenga que "replantearse en esencia". El motivo de esta nueva visión es, según dijo, que los alumnos "llegan con una bagaje y una información con la que no habían contado nunca".
Al respecto, Carbó instó a "replantear el papel alumno-maestro", entendiendo al segundo más como un guía, y afirmó que "no se trata de dar conocimiento sino de generar capacidades y acompañar al alumno en ese proceso de crecimiento personal".
En el ámbito de la cooperación cultural, Carbó señaló que, en ocasiones, "cuesta entender que se ponga el acento en la cultura cuando aparentemente hay necesidades mucho más básicas" y citó al director de la Cátedra UNESCO de la Universitat de Girona, Alfons Martinell, quien afirma que "salir de la pobreza no es sólo comer sino generar habilidades y competencias para poder entrar en un círculo de desarrollo".
Como ejemplo de este tipo de actuaciones, se refirió al proyecto 'Conarte', desarrollado en México, en el cual los alumnos de las escuelas públicas, "en muchos casos con problemas de autoestima", aprenden a través de la danza y la música. De esta manera, según Carbó, se genera un ambiente que permite garantizar que los niños continúen en la escuela.
Respecto a la posición de la cooperación española con relación a otros países, Carbó recordó que España era "hasta hace relativamente poco" un país receptor de ayuda. Sin embargo, puntualizó que, aunque la experiencia en el tiempo es reducida, la calidad "es muy buena".
