La Fiscalía de Cantabria colaboró en investigaciones judiciales de siete países europeos el año pasado

Actualizado: sábado, 8 diciembre 2012 11:56

Fiscales holandeses e italianos se trasladaron a la región para tomar declaraciones, mientras que otras se realizaron por videoconferencia


SANTANDER, 8 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Fiscalía de Cantabria, a través de la sección de Cooperación Internacional, colaboró el año pasado con distintas fiscalías y tribunales de al menos siete países europeos, entre ellos Holanda, Italia, Portugal, Hungría, Rumanía y Bulgaria.

Así se pone de manifiesto en la memoria de la Fiscalía de 2011, a la que ha tenido acceso Europa Press. Uno de los casos en los que cooperó la Fiscalía cántabra fue en un presunto delito de estafa continuada durante más de 15 años a un dentista holandés, actualmente afincado en Cantabria, presuntamente por el entorno de su antigua enfermera. Los fiscales holandeses se trasladaron a Cantabria para tomar declaración al perjudicado.

También viajaron a Cantabria fiscales de Nápoles, para presenciar la declaración de un ciudadano argentino residente en España, imputado en un procedimiento instruido en Italia por un delito de apuestas ilegales en el fútbol. Teniendo en cuenta que este delito no está tipificado con tal especificidad en España, aunque genéricamente pueda calificarse de estafa, el fiscal cántabro también permitió la presencia tanto del letrado de la defensa en nuestro país como de un abogado italiano conocedor de su legislación procesal.

Sin embargo, en otros casos la toma de declaración se realiza por videoconferencia. De hecho, la Fiscalía cántabra destaca en su memoria la conveniencia de aprovechar este tipo de recursos e insta a la potenciación de la videoconferencia.

Otras diligencias en las que participó la Fiscalía cántabra, en este caso a instancia de la Fiscalía de Sofía (Bulgaria) supusieron una completa investigación de la presunta estafa cometida desde Santander a un ciudadano búlgaro, en la que partiendo de un número de cuenta corriente y de una transacción realizada en nombre de una sociedad domiciliada en esta ciudad, se investigó la sociedad a través del registro mercantil, a los diferentes administradores de la misma, así como la titularidad de la cuenta, las transacciones de la misma y la conexión con la sociedad, lo que permitó identificar a un ciudadano de Camerún como presunto autor de la estafa.

Por su parte, la dirección para investigar las infracciones de criminalidad organizada y de terrorismo de la Fiscalía de la Alta Corte de Casación y Justicia de Bucarest, solicitó asistencia judicial a la Fiscalía cántabra en relación con el conductor de un vehículo que transportaba 176 kilos de cocaína procedentes de Bolivia, quien al ser detenido en Rumania, declaró tener la residencia en una localidad de Cantabria y presentó una documentación justificativa, cuyo examen en aras del auxilio instado, resultó falsa.

Otra petición de colaboración, instada en este caso por la Fiscalía de Budapest, consistió en la toma de declaración de un ciudadano chino como autor de un presunto delito de falsificación de documento oficial.

Por otro lado, a solicitud del Ministerio Público de Cascáis se tomó declaración en Cantabria a la testigo del incendio de un inmueble registrado en aquella localidad. A ello se unen otras dos colaboraciones con la Fiscalía portuguesa, consistentes en la toma de declaración de un imputado y de dos testigos de un delito de violación en la localidad de Paredes, y de la imputada de un delito continuado de robo en la ciudad de Mira.

Según destaca la Fiscalía en la memoria de 2011, recogida por Europa Press, solamente tres de las 12 peticiones de cooperación internacional recibidas en 2011, han consistido en mera notificación de resoluciones.

Así, a petición del tribunal portugués de Valongo se comunicó al imputado de un delito de fraude fiscal agravado el escrito de acusación del Ministerio Fiscal y la fecha de la vista; la Fiscalía del Tribunal de Apelación de Rennes solicitó la notificación de una citación para prestar declaración por videoconferencia, que finalmente se llevó a cabo desde la prisión de otra Comunidad a la que fue trasladado; y la Fiscalía búlgara de Haskovo reclamó el auxilio de su homóloga cántabra para comunicar la imputación por delito de estafa, de un ciudadano de dicho país, y la fecha del juicio.