CIUDAD REAL, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
El delegado del Gobierno en Castilla-La Mancha, Máximo Díaz-Cano, ha pedido dejar trabajar con tranquilidad a la Policía Nacional para que pueda esclarecer todos los aspectos de la reyerta de Valdepeñas (Ciudad Real) en la que, el pasado día 22 de septiembre por la noche, murieron un hombre de 48 años y su hijo de 21.
En una rueda de prensa este martes para presentar una operación contra el tráfico de drogas en la provincia de Ciudad Real, en la que han sido detenidas 22 personas, Díaz-Cano se ha remitido al secreto del sumario decretado por la jueza que lleva el caso para no aportar más datos.
En todo caso, Díaz-Cano ha considerado que las investigaciones darán resultado en poco tiempo y ha reiterado su petición para que las mismas se puedan desarrollar con normalidad.
Por otro lado, a preguntas de los medios, el delegado del Gobierno en la región ha descartado la veracidad de los comentarios que circulan por Valdepeñas sobre una supuesta entrega a las fuerzas del orden de los participantes en la reyerta.
En este caso, otro hombre, de unos 50 años de edad, el único detenido por este suceso, fue operado en el Hospital General de Ciudad Real, donde se le amputó una pierna.
