VALLADOLID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
Las organizaciones sindicales de Castilla y León se han mostrado satisfechas con el acuerdo alcanzado este miércoles en la Conferencia Sectorial de Educación para que el curso escolar concluya en el mes de junio con carácter general y con que no se dé por perdido a pesar de la situación de excepcionalidad que está afectando al tercer trimestre, sin clases presenciales debido a la pandemia del coronavirus, aunque han pedido "concreción" en las medidas a adoptar.
En declaraciones a Europa Press, la responsable de Educación de CSIF Castilla y León, Isabel Madruga, considera "oportuna" la confirmación de que el curso no se prolongará en el verano, ya que de lo contrario podría dar la sensación de que ahora se encuentra interrumpido, a pesar de que sí se mantiene la actividad lectiva de forma no presencial.
Este sindicato ha alabado que no se haya optado por la "tentación populista" de un aprobado general que resultaría "contrario a los principios educativos lógicos" y ha advertido de que "cualquier clase de refuerzo" que se organizara en julio debería quedar fuera del curso académico que concluye el 30 de junio.
Madruga ha reconocido la necesidad de "adaptarse" a las circunstancias de cada nivel educativo a la hora de valorar la formación impartida en este trimestre de forma telemática, ya que como ha recordado, en algunos como en segundo de Bachillerato "no se puede no avanzar en materia", con independencia de que a la hora de evaluar contenidos se pueda "ir a lo básico".
CSIF considera que se debe aprovechar la situación para planificar "desde ya" el curso que viene, mediante el incremento de docentes y la reducción de las ratios de alumnos, al tiempo que ha abogado por que los partidos políticos aprovechen para alcanzar un pacto de Estado educativo.
Por su parte, la representante de UGT, Beatriz García, ha defendido que a la hora de evaluar el curso se busque "lo más justo posible" para "no regalar" notas que supondrían un agravio comparativo respecto a aquellos alumnos con mejores notas, pero tampoco perjudicar a aquellos con mayores dificultades para seguir la formación de forma telemática.
"Las notas tienen que ser equiparables", ha subrayado García, quien ha recordado que los dos primeros trimestres se han desarrollado y evaluado "con normalidad", por lo que ha coincidido con Madruga en que "no se puede dar el curso por perdido por un trimestre".
EQUILIBRIO
Tras admitir la dificultad para alcanzar un equilibrio, se ha mostrado a la espera de ver las propuestas que la Consejería de Educación presentará a los sindicatos en la Mesa Sectorial que se celebrará este viernes, 17 de abril.
En este sentido, su homóloga de CCOO, Elena Calderón, ha reconocido que su sindicato está de acuerdo con las medidas acordadas para "evitar desigualdades" y que lo tratado en el último trimestre sirva para "sumar" en la evaluación de los dos primeros trimestres, pero ha lamentado que "falta concreción" por parte de las administraciones educativas.
Así, ha mostrado sus dudas respecto a la celebración de las pruebas de acceso a la universidad, la EBAU, ante la incertidumbre respecto a la desescalada de las medidas sanitarias para "garantizar la salud de los alumnos".
En cuanto a la opción, planteada por la Consejería de Educación de habilitar un periodo en septiembre para que puedan concluir la formación necesaria de estudiantes universitarios que deban titularse este curso, ha preguntado por la situación de los aquellos en el último curso de Formación Profesional que deben completar sus prácticas para poder graduarse.
Por último, ha advertido de la "falta de preparación" de los centros educativos para poder dar clases de refuerzo fuera del curso durante el verano con las altas temperaturas que pueden registrarse en esos meses, además de la "inversión" que sería necesaria para contratar profesores externos que impartan las clases.
