Foto: EUROPA PRESS
BARCELONA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Guardia Urbana de Barcelona y los Mossos d'Esquadra han realizado la madrugada de este sábado un macrocontrol policial en la zona de discotecas de Marina, en el barrio de Poblenou, tras recibir numerosas quejas de vecinos por los ruidos y el incivismo.
Ambos cuerpos policiales han desplegado una cincuentena de agentes que han montado varios controles de alcoholemia, el más importante en la confluencia de las calles Almogàvers y Joan d'Àustria, y han hecho patrullaje por la zona para cazar a ciudadanos que bebían alcohol u orinaban en la calle.
La actuación denominada 'Triángulo Lúdico', que ha empezado a las 2 de la madrugada, se centra en "congeniar el descanso de los vecinos con el ocio" y atacar las malas acciones, según ha explicado en declaraciones a los periodistas el subinspector de la Urbana Eduard Fornells.
Los agentes interponen denuncias sobre todo por faltas administrativas que comportarán una multa, aunque si detectan delitos como llevar armas prohibidas o venta de estupefacientes, entonces los Mossos actúan.
También controlan el ruido en las calles y que la gente no haga 'botellón', y según el sargento de los Mossos Xavier Calbó, actúan si hay peleas, aunque no se ha detectado últimamente que se haya producido ningún aumento.
DECENAS DE ALCOHOLEMIAS
Durante la noche, la Urbana, además de hacer decenas de controles de alcoholemia y drogotest, ha ido parando a grupos de jóvenes porque alguno de ellos había orinado en la calle o porque iban bebiendo.
Asimismo, han desalojado un bar musical de la calle Pamplona porque había llegado su hora de cierre y seguía entrando gente, además de que pese a tener licencia de bar, tienen pista de baile, una decisión que ha generado rechazo a la clientela aunque en pocos minutos el establecimiento estaba vacío.
Al 'briefing' de antes del operativo en la comisaría de la Urbana en Sant Martí, donde el mando del operativo ha dado las instrucciones a sus agentes, ha asistido el teniente de alcalde de Seguridad, Joaquim Forn, y el intendente jefe de la Guardia Urbana, Evelio Vázquez, para seguir de cerca el despliegue.
