Jáuregui no vería justo que el fondo de liquidez pusiera condiciones a las CC.AA. un asuntos como gastos en políticas identitarias
MADRID, 2 Sep. (EUROPA PRESS) -
El diputado del PSOE y exministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, ha advertido este domingo al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que el pacto fiscal que propone "no es la urgencia" de España.
En una entrevista con Europa Press, ha considerado que no sería "justo" que el Gobierno central pusiera condiciones a las CC.AA. que acuden al fondo de liquidez en asuntos como los gastos en cuestiones identitarias o en la gestión de sus "políticas internas", y ha considerado que las condiciones sólo deben ser macroeconómicas.
Jáuregui ha expresado su "respeto" por la petición del Govern del pacto fiscal, pero ha dejado claro que no es una urgencia para España ni es "estrictamente posible" en los términos en los que se plantea.
Ha admitido que es posible que renegocie el modelo de financiación, aunque no cree que ahora sea el momento, sino cuando se vaya remontando la crisis y se recuperen los ingresos fiscales.
En cualquier caso, ha asegurado que cualquier cambio en la financiación autonómica, no debe hacerse en los "términos que plantea el pacto fiscal".
Ramón Jáuregui, que se inclina más por la postura que está defendiendo el PSC para la mejora del modelo de financiación autonómica, sí ha precisado que los problemas financieros de Catalunya "son los problemas de España" y existe la obligación de resolverlos bajo los principios de solidaridad y cooperación que rigen el funcionamiento del Estado autonómico.
CATALUNYA, GENEROSA CON ESPAÑA
"El Estado tiene que ser solidario con Catalunya porque Catalunya es muy generosa con España", ha defendido el diputado socialista sin querer juzgar la manera en la que la Generalitat ha ejecutado su petición de ayuda financiera (diciendo que era dinero de Catalunya y no iban a dar las gracias).
Tampoco ha considerado que el Gobierno deba poner condiciones adicionales o de renuncia a las políticas identitarias de Catalunya por acudir al fondo de liquidez autonómico y poder refinanciar los vencimientos de la deuda.
En su opinión, no sería justo que el Ejecutivo condicionara las políticas internas, como las identitarias, el gasto en televisiones, sanidad o educación, y quebrase su autogobierno.
"Condicionar la ayuda que el Estado ha creado para la sostenibilidad financiera de las comunidades autónomas a sus políticas internas no es procedente --ha sostenido el exministro de Presidencia--. No me parecería justo que al mismo tiempo que se establece un sistema de financiación, el Estado determinara la política interna".
En este contexto, Jáuregui ha recordado que el Estado autonómico responde a unos criterios "que no pueden ser alterados tampoco en estas circunstancias" y el denominado principio del autogobierno con el que cuenta cada administración no debe ser cuestionado en ningún caso.
Además, ha mostrado su esperanza de que los 18.000 millones de euros con los que el Gobierno ha dotado a este mecanismo sean suficientes para atender a las necesidades de liquidez de las autonomías. "Habrá que ver, creo que es suficiente. Si no lo es, el Gobierno nos dirá qué piensa hacer", ha apuntado.
UN MÍNIMO DE RECURSOS
A su juicio, el actual modelo de financiación es justo y ha ido ganando en justicia progresivamente, y aunque "todo es mejorable", ha rechazado abrir un debate de balanzas entre comunidades autónomas porque entonces el sistema "no va a resistir".
"No debemos perder nunca la perspectiva de que somos un Estado que tiene que funcionar y que reclama para el Gobierno central un mínimo de recursos para que pueda cumplir sus funciones", ha dejado claro.
El portavoz socialista en la Comisión Constitucional del Congreso ha reconocido que se puede mejorar el sistema de financiación --"seguramente es obligado"-- pero ha insistido en que debe articularse un modelo que responda al conjunto del Estado.
Además, ha aplazado esa reforma del sistema de financiación autonómica a los próximos años, una vez superados los próximos dos ejercicios de consolidación del déficit y en espera de que la economía española "empiece a recuperarse para que las expectativas de recaudación permitan un acuerdo en el modelo".
