Esperanza Moya dará vida a una adolescente en 'Los protegidos'

La actriz Esperanza Moya
Beatriz Velasco
Actualizado: miércoles, 23 diciembre 2009 14:46

MADRID, 23 Dic. (Por Rocío Cadierno) -

Tras protagonizar las portadas de las revistas internacionales más exclusivas, Esmeralda Moya se ha convertido en uno de los rostros más frescos de la televisión nacional. Ahora, la actriz regresa a la pequeña pantalla con 'Los Protegidos', la última apuesta por la ficción de Antena3.

Esta madrileña de 24 años volverá a encarnar un personaje mucho más joven que ella. En concreto, dará vida a Claudia, una adolescente sin escrúpulos cuya interpretación ha supuesto, además de un cambio de registro, un favorecedor cambio de look.

- ¿Cómo te vamos a ver en la serie?

-La serie cuenta el día a día de una familia donde cada uno tiene una característica especial y su relación con sus vecinos. Yo entro en la trama de los vecinos y mi personaje es la chica sin escrúpulos, la diva de clase, que en el fondo tiene carencias afectivas.

-Además del cambio de registro has experimentado un cambio de look.

-Me han cortado el flequillo para parecer un poco más mala y para mantener la edad, porque se supone que esta chica tiene 17 años y yo ya tengo 24.

-Te vamos a ver en un papel muy diferente al que interpretaste en '90-60-90', donde eras muy dulce, muy ingenua.

-En esta serie soy más conflictiva. A mi personaje le gusta que se peleen por él, le gusta llamar la atención, siempre tiene algún comentario para todo...

-Muchos de los personajes de la serie tiene poderes sobrenaturales. De poder elegir, ¿cuál te gustaría tener a ti?

-Me encantaría poder leer el pensamiento de los demás. No es que me importe lo que piensen de mi, pero soy muy curiosa. Siempre estoy callada, observando a los demás, estoy siempre pendiente de todo y no se me escapa ni una.

-No será que ahora que eres más conocida no te fías tanto de lo que te dicen.

-Qué va. Yo sigo siendo la misma, por esto no hay que cambiar y no te tiene que importar lo que piensen los demás. Lo importante es hacer el trabajo lo mejor posible, porque todo es mejorable siempre.

-Hubo grandes expectativas con '90-60-90', pero los resultados de audiencia no fueron muy positivos. ¿Ha supuesto una decepción para ti?

-Siempre que inicias un proyecto esperas que salga bien y que interese a la gente, porque vivimos de las audiencias. Es un poco triste, porque yo invertí todo el verano, tanto preparándome como rodando, son once horas y es mucho esfuerzo. Además, el sacrificio no es solo mío, sino de todo el equipo técnico y artístico. Te vienes un poco abajo porque es muy complicado dar en el clavo con lo que la gente quiere en cada momento. Yo estoy contenta porque ese emitió entera y la ha visto bastante gente. Por la calle todo el mundo me dice que estaba muy bien.

-¿Qué falló entonces?

-No lo sé. Si supiéramos la fórmula exacta del éxito ya la habríamos aplicado. Creo que en los tiempos que corren es muy complicado acertar, pero también influyó la competencia de nuestro día de emisión, con 'CSI' y 'La Señora'. No obstante, los públicos eran muy diferentes.

-¿Te inspira confianza esta nueva serie en que estás involucrada?

-A mí me da muy buen rollo. Pero claro, siempre que empiezas un proyecto te da buen rollo. Lo único que pido es que las cadenas tengan paciencia.

-¿Qué tiene esta serie qué no tengan otras?

-Es muy original. Las características de cada personaje son muy diferentes, los objetivos de cada miembro de la familia son distintos y eso da mucho juego. A mí, personalmente, me gustan mucho los niños.

-¿Cómo te sientes al encarnar siempre a personajes más jóvenes que tu?

-Estoy bien haciendo papeles de este tipo y para mi es como un juego, es como revivir los 15, los 16... Me dejan hacer cosas que en mi vida normal ya no puedo permitirme. Lo que me gustaría hacer en un futuro es comedia romántica.

-¿Tienes algo en común con tu personaje?

-Nada. No soy nada creída no me gusta llamar la atención. Pero el papel me gusto mucho cuando me lo pasaron porque es diferente a todo lo que he hecho antes y es muy divertido.

-¿Cómo te recuerdas tú con 17 años?

-Mi personaje de '90-60-90' me recuerda mucho a esa época. Era muy luchadora y no tenia miedo a nada. Ahora, a medida que creces, vas teniendo más miedo a enfrentarte a las cosas.

-¿Tienes algún proyecto pendiente?

-No, de momento estoy muy liada con esto.

-¿Estás en un punto en el que puedes elegir lo que quieres hacer?

-Siempre decido lo que me apetece hacer y lo que no, pero no estoy en el punto de elegir porque lo que quiero es aprender. De momento no he rechazado ningún proyecto porque no he sentido la necesidad de decir que no, no he visto nada que no me guste o que fuera deshonroso. Pero mi objetivo hoy día es aprender.

-El mundo de la moda ¿lo has dejado aparcado?

-Sigo haciendo cosas de moda, pero ya como actriz. Ya no me voy a Nueva York, no soy conocida como modelo, sino como actriz. Ahora he hecho la campaña de 'Armand Basi', pero porque soy un rostro conocido de televisión.

-¿Vas a tener vacaciones de Navidad?

-Este año me vuelvo a quedar sin vacaciones, pero no me importa porque estoy haciendo lo que quiero y mucha gente haría lo que fuera por tener la oportunidad que yo he tenido.

-¿Qué deseo pedirías para esta Navidad?

-A la Navidad le pido que todo me siga yendo igual de bien y que mi familia esté bien y me siga apoyando como hasta ahora. Normalmente me hago propósitos para el nuevo año, pero solo los cumples el primer mes. Me voy poniendo metas, pero la felicidad es un camino, no es una meta y hay que asumir todo lo que te viene.

-¿Cuál es tu meta para el próximo año?

-A nivel personal me propongo no cambiar, seguir feliz con mi familia y amigos. En el plano profesional quiero llegar lejos.

-¿Qué te gusta hacer en Navidad?

-Me gusta ir a cenar a casa de mis amigos. Me gusta estar muy acompañada y comer y descansar mucho.

-¿Recuerdas alguna Navidad con especial cariño?

-La que pillé a mis padres dejando los regalos. Me avisó mi hermano Carlos y cuando me levanté me dije "no puede ser". Me habían regalado un piano y a mi madre se le cayó al suelo, aunque yo ya me lo imaginaba.

-¿Algún ritual para el nuevo año?

Escribo tres deseos en un papel y lo piso con el pie derecho mientras brindo. Pero no soy de ponerme ropa interior roja ni nada.