Terapias "a la carta" y de más corta duración permiten optimizar el tratamiento de la Hepatitis C, según expertos

Actualizado: miércoles, 15 febrero 2006 23:02


MADRID, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -

El futuro en el tratamiento de la infección por el Virus de la Hepatitis C (VHC) indica que las terapias más eficaces son las que se realizan en forma personalizada y por períodos de tiempo más cortos, tomando en cuenta el tipo genético del virus y la respuesta del paciente a los fármacos. Así lo indicaron hoy los especialistas María Buti, del Hospital Vall d'Hebron de Barcelona y José María Sánchez Tapia, del Hospital Clinic, de Barcelona, en el marco del XXXI Congreso de la Asociación Española para el Estudio del Hígado que se realiza en Madrid del 15 al 17 de febrero.

Sánchez Tapias explicó que los resultados preliminares de estudios realizados han permitido reducir hasta la mitad el tiempo de la terapia combinada de peginterferón alfa2b y rivabirina en pacientes afectados por los distintos genotipos del virus mientras que Raúl Andrade, profesor de la Universidad de Málaga y especialista en enfermedades digestivas y hepatología del Hospital Clínico Universitario Virgen de la Victoria, anticipó algunos resultados prometedores del desarrollo de un nuevo fármaco que, se espera, permita curar a los enfermos con genotipo 1 que no responder al tratamiento combinado de peginterferón y rivabirina que se emplean actualmente.

"Los estudios desarrollados, que todavía no son completos ni definitivos pero que aportan informacion clara, indican que es posible ajustar más el tratamiento de cada paciente, atendiendo, en primer lugar al genotipo, y en segundo lugar a la respuesta que demuestra al tratamiento", señaló Sánchez Tapias en referencia a lo que se denomina como tratamiento o terapia "a la carta".

"Así, a los enfermos de genotipo 2 y 3 que responden rápidamente al cabo de 4 semanas de tratamiento, es suficiente tratarlos en un periodo corto de 12 a 16 semanas, en vez de las 24 semanas que veniamos tratándolos hasta ahora y con esto, se consigue solucionar el problema de estos pacientes, con menos gastos, menos medicamentos y menos inconvenientes para los pacientes ya que el tratamiento incorpora efectos secundarios que son molestos", especificó el profesional.

De igual modo, estudios realizados a infectados por el genotipo viral 4 y 1 -para quienes se venía recomendando terapias combinadas de 48 semanas- demostraron que los que tienen una baja carga viral, negativizan el virus más rápido y por tanto, se les puede reducir el tratamiento de 48 a 24 semanas.

Por otra parte, según indicó la doctora Buti, en estos estudios también se ha comprobado que cuando se alcanza la negativización precoz del virus tras cuatro semanas de tratamiento, se puede, no sólo predecir el resultado final sino también identificar qué pacientes pueden curarse con tratamientos más cortos.

UN TRATAMIENTO PROMETEDOR

Por su parte, Raúl Andrade informó acerca de los prometedores avances en el desarollo que un nuevo fármaco que - en monoterapia, o combinado con peginterferón con o sin rivabirina- se espera permita tratar a aquellos pacientes que no responden al tratamiento de peginteferón y rivabirina que, se calcula, son un 40% de los tratados, en su mayoría del genotipo 1.

Según Andrade, "los resultados preliminares de los ensayos realizados con los inhibidores de la proteasa nos ponen de manifiesto un futuro esperanzador en el tratamiento de la hepatitis C", aunque prefirió mantener la cautela, tendiendo en cuenta que se encuentran en la fase 2 de su desarrollo clínico.

Este nuevo fármaco, denominado SCH 503034 y desarrollado por Schering Plough,se administra de forma oral y actúa como inhibidor de la protoasa. Se espera que permita tratar la hepatitis C en pacientes genotipo 1, no respondedores a la otra terapia.

UNA MEJOR EFICACIA ANTIVIRAL

Por último, el doctor Rafael Esteban Mur, en representación de Fred Poordad, del Hospital Cedars-Sinai, de Los Ángeles (Estados Unidos), dio a conocer los resultados de un meta-análisis realizado con datos clinicos de 800 pacientes con hepatitis crónica que permitió concluir, aún en forma preliminar, que la terapia combinada de peginterferón alfa-2b y rivabirina, adaptada al peso del paciente, es más eficaz que la terapia combinada entre dosis fijas de peginterferón alfa-2a en infectados con los distintos genotipos virales.

Según indicó Mur, el 49% de los pacientes tratados con peginteferón alfa-2b logró una respuesta viral sostenida frente al 36% lograda por la terapia a dosis fijas con el tipo alfa-2a y "además la tasa de los que vuelven a recaer es más baja usando el tipo alfa-2b que el alfa-2a"

Los resultados surgen del meta-análisis de 800 casos desarrollado por Schering y, según aclaró, el investigador, son preliminares porque forma parte de un meta-analisis más amplio, de 3.000 casos, que está en curso.

El virus de la hepatitis C afecta a unos 170 millones de personas en el mundo, de los que cinco millones son europeos; y es la principal causa de transplante hepático.