'Hope', una gacela nacida en cuarentena en Bioparc y un canto a la esperanza

VALNCIA 24 Abr. (EUROPA PRESS) -

La gacela Mhorr nacida en Bioparc Valncia durante el estado de alarma se llamará 'Hope' (esperanza) como "icono de superación de la adversidad desde la cooperación y el compromiso común", ya que es una especie que llegó a estar extinta en su hábitat.

Más de 2.500 personas han participado en la elección del nombre a través de la web del parque y han escogido la palabra internacional que significa esperanza con el 50% de los votos.

Hace un mes, recién entrada la primavera, el equipo multidisciplinar que sigue velando por el bienestar los animales recibía con alegría el primer nacimiento en el parque durante el confinamiento.

La casualidad hizo que esta primera nueva vida fuera una gacela Mhorr (Nanger dama mhorr), un bellísimo antílope que se extinguió en su hábitat y ha conseguido salvarse de desaparecer completamente gracias a la cooperación internacional para coordinar el esfuerzo de los conservacionistas.

El equipo quiso compartir esta buena noticia en un momento tan especial y solicitó la colaboración de la población para, entre todos, elegir el nombre de la pequeña gacela. Con una participación "enorme", 'Hope' se ha alzado como el favorito al recibir la mitad de los votos, seguido por 'Azahar' (37%), 'Esperanza' (9%) y 'Alegría' (4%).

La denominación final, 'Hope', es una palabra inglesa internacionalmente conocida que significa esperanza; "sin duda, un mensaje de este mundo globalizado en el que nos encontramos", destaca el parque valenciano en un comunicado.

Esta preciosa cría, arropada por su manada, ya disfruta de las instalaciones exteriores de la sabana, donde corretea sin parar y se acerca a la madre para mamar a su antojo. Las gacelas Mhorr viven en un recinto multiespecie que comparten con otros antílopes, los addax y las grullas coronadas cuelligrís; muy cerca de otro de los espacios más emblemáticos del parque, donde habitan rinocerontes, cebras y avestruces.

'Hope' ha nacido dentro del Programa de Reproducción Internacional (EEP) de esta especie, que trabaja para garantizar su supervivencia y la posible reintroducción en la naturaleza, de donde nunca debería haber desaparecido. Recuerda que "es posible vencer la adversidad cuando se coopera con un fin común", en este caso la conservación de la biodiversidad del planeta.

Exterminada por la caza sin control, en los últimos años varios proyectos han conseguido devolver a esta carismática especie a diversas zonas del norte de África. Bioparc confía en que "juntos saldremos adelante de la pandemia y que seamos más conscientes de la necesidad de comprometernos desde lo individual para colaborar con la protección del entorno como forma de preservar la riqueza de la naturaleza".