BILBAO, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
La dirección deportiva del Lagun Aro Bilbao Basket está a punto de ver los frutos de semanas de trabajo escudriñando el mercado internacional, y tras la incorporación del alero deseado, un francotirador del perímetro como Lucas Recker, el objetivo ahora es completar su nómina de pívots con dos jugadores de garantías, si es posible comunitarios, sin desdeñar la posibilidad de incorporar un base.
"Para no variar la dinámica de las últimas semanas, casi meses, en estos momentos tenemos varios frentes abiertos, a la espera de las decisiones finales de los jugadores. Estamos trabajando en dos pívots, comunitarios si es posible, que den competitividad y estabilidad a nuestro juego interior", confirmó el técnico del Bilbao Basket, Txus Vidorreta en el web oficial del club.
El entrenador bilbaíno añadió que "en función de su procedencia estaría el segundo base", si bien anticipó que se va "a respetar" el contrato en vigor de Ivan Koljevic. "En todo caso --precisó--, esta circunstancia no sería un impedimento para incorporar un base".
La plantilla 'rojilla' podría quedar provisionalmente cerrada con diez jugadores. En tal caso, Vidorreta anunció que está contemplando "la posibilidad de incorporar a varios jugadores jóvenes para los entrenamientos", que pueden ser, bien del entorno "o incluso europeos".
PRETEMPORADA
Todos los que estén fichados en los próximos días deberán incorporarse al equipo a mediados de agosto. Los días 18 y 19 están previstas las pruebas médicas, y los entrenamientos se iniciarán, en plena Aste Nagusia bilbaína, el lunes 21 de agosto, con todos los jugadores disponibles, en un acto de presentación.
"Los planes de trabajo contemplan 10 días de entrenamientos en doble o triple sesión. Ya en septiembre comenzaremos a jugar partidos. Me gustaría cerrar unos siete partidos contra equipos de LEB y ACB, como en anteriores pretemporadas. Siempre en función de la disponibilidad de los posibles rivales", adelantó Vidorreta.
