GRANOLLERS (BARCELONA), 27 May. (EUROPA PRESS) -
El Frankin Granollers venció en la vuelta (37-33) de la Recopa de Europa, pero no logró remontar los 9 goles de diferencia que le endosó el Gummersbach en el partido de ida de la final europea (34-25) por lo que se despidió del sueño de repetir el título 34 años después.
El partido comenzó como era previsible. Ambos conjuntos salieron nerviosos y les costó bastante coger el ritmo al partido. Los catalanes, impulsados por el público, empezaron a dominar en el marcador pero los alemanes se supieron sobreponer y no les dejaron irse por más de dos goles.
A medida que iban pasando los minutos la intensidad defensiva y el poco acierto de cara al gol iba en aumento pero el Frankin Granollers, consciente de que necesitaba una remontada épica, empezó a tirar del carro y se fue en el electrónico, aunque no lo suficiente para meter presión a los defensores del título.
Los de Lorenzo Rueda, que mejoraron su rendimiento al contragolpe, se marcharon por dos goles de ventaja (18-16), aunque pudieron ser más, al descanso gracias a la gran actuación de Cutura y a su efectividad en los lanzamientos desde los 7 metros.
La segunda mitad fue totalmente diferente a la primera, los dos conjuntos salieron mucho más 'enchufados' y los goles se iban sucediendo de portería a portería. El combinado vallesano se vio sorprendido con el nuevo planteamiento de los visitantes y desperdiciaron la ventaja que habían conseguido con anterioridad. Los verdugos del Reyno de Navarra en semifinales llegaron a hacer un parcial de 0-4.
El Granollers se supo reponer al varapalo, pero no logró en ningún momento hacerse con el control del juego. Esa falta de dominio y su incapacidad de parar los contraataques de los teutones les impidió lograr la proeza de alzarse con la Recopa de Europa. De esta forma el Gummersbach se coronó por segundo año consecutivo como el mejor del segundo certamen europeo.
