MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
La selección española de ciclismo no partirá por primera vez en muchos años entre las favoritas para pelear por el maillot aircoiris de campeón del mundo ya que acude a la prueba de Fondo de Doha que cierra este domingo los Mundiales de Carretera sin sus principales nombres.
España siempre es uno de los equipos a vigilar en esta cita, pero en esta ocasión parece que tendrá un papel más secundario ya que en su 'nueve' no están sus piezas más destacadas de antaño como el murciano Alejandro Valverde (Movistar Team), ganador de seis medallas mundialistas y que se autodescartó después de un 2016 donde lo ha corrido todo, y el catalán Joaquim 'Purito' Rodríguez, ya retirado.
Tampoco está entre los elegidos por Javier Mínguez el madrileño Alberto Contador (Tinkoff) u otros corredores que han despuntado esta temporada como Ion Izagirre (Movistar Team), lo que deja al equipo sin un referente claro en un recorrido que además no favorece los intereses españoles por ser absolutamente llano y sin ninguna dificultad.
"No es un circuito en el que tengamos muchas opciones si llegamos al sprint, ni tampoco somos los favoritos si se rompe la carrera. No es nuestro circuito, ni es una carrera que nos ilusione, salvo para algunos ciclistas a los que no les va del todo mal, aunque nunca vayamos a ser la referencia", confesó el propio seleccionador.
De este modo la responsabilidad de hacer un buen papel recaerá en Carlos Barbero y Diego Rubio (Caja Rural-Seguros RGA), Jonathan Castroviejo, Imanol Erviti, Juan José Lobato y Fran Ventoso (Movistar Team), David De la Cruz (Etixx-QuickStep), Omar Fraile (Dimension Data) y Luis Ángel Maté (Cofidis). De todos ellos, De la Cruz, Fraile, Barbero, Rubio y Maté debutan en un Mundial.
El objetivo será tratar de meterse en las escapadas y de estar en las selección final que se jugará las medallas, previsiblemente por el perfil de la prueba, en el sprint final donde Mínguez confía en lo que puedan hacer Lobato y Barbero.
El eslovaco Peter Sagan (Tinkoff) tendrá la difícil misión de defender su maillot arcoiris, algo que no se consigue desde que el italiano Paolo Bettini ganase los Mundiales de 2006 y 2007. El actual campeón no ha decidido hasta el último momento su presencia en Doha, pero estará en la línea de salida y por su calidad todo se puede esperar de él.
Sin embargo, serán los grandes velocistas los principales favoritos. Alemania cuenta con hasta tres bazas como Marcel Kittel, André Greipel y John Degenkolb, mientras que el británico Mark Cavendish parte con muchas opciones de lograr su segundo título tras el de 2011 en Copenhague. El australiano Michael Matthews, el francés Nacer Bouhanni, el italiano Elia Viviani o un veterano como el belga Tom Boonen pueden ser otras opciones.
