Foto: EUROPA PRESS
PAMPLONA, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
El pentacampeón español del Tour de Francia, Miguel Indurain, admitió este miércoles la dureza del recorrido de la 67 edición de la Vuelta ciclista a España, que se disputará del 18 de agosto al 9 de septiembre de 2012 y que arrancará con una contrarreloj por equipos en Pamplona, su tierra natal, por parte del recorrido de los tradicionales encierros de los Sanfermines.
"¿Una buena Vuelta? Sí, para ir en coche", bromeó. "No sería una Vuelta para mí, hay mucha montaña, los rodadores como lo era yo lo van a tener difícil, pero también tienen sus oportunidades. Han reducido mucho el kilometraje y hay espectáculo en los finales, que es lo que el aficionado demanda", comentó el campeón navarro tras asistir al anuncio oficial del trazado en Baluarte, Palacio de Congresos y Auditorio de Navarra en Pamplona.
Indurain destacó que Pamplona, casi 20 años después de haber acogido la última etapa de la Vuelta, el 8 de mayo de 1994, vuelva a albergar a la caravana de la ronda nacional durante la semana previa. "Será el centro de atención del ciclismo, porque aquí estarán los mejores ciclistas del mundo no sólo un día sino en los previos a la salida", apuntó.
Sobre la crono inaugural de la Vuelta, el exciclista dijo que el principio "es un poco complicado, luego hay grandes avenidas en las que se pueden alcanzar buenas medias y el final es en subida". "¿Peligrosa? Hay más peligro en los Sanfermines", comparó entre risas.
De la segunda etapa en Navarra, entre Pamplona y Viana, con el primer puerto de la ronda, el Alto de la Chapela, que pasa junto a su casa en Villava y la localidad natal de su excompañero José Vicente 'Chente' García Acosta, presente también en el acto, Tafalla, señaló que "se podían hacer etapas más duras, pero había que hacerlas de una dureza media". "El organizador y la afición están demandando etapas con finales con salsa. Creo que es una Vuelta compensada y va a estar animada", comentó.
