BILBAO, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
El Athletic Club de Bilbao logró el último billete para los cuartos de final de la Copa del Rey tras superar (2-0) al Osasuna en San Mamés, en un encuentro en el que el conjunto de Caparrós, muy motivado, se mostró superior desde el inicio al bloque navarro.
El conjunto bilbaíno, dispuesto a sentenciar una eliminatoria que el tanto de Llorente encarriló en la ida, apostó de inicio por su once prácticamente de gala, ante un Osasuna plagado de suplentes y con la cabeza en la liga, donde atraviesa una delicada situación.
El Athletic salió en tromba y apabulló en los primeros minutos al cuadro de Camacho, incapaz de superar la línea de presión de los locales, que ahogaba la salida del balón de los de Tajonar llegando cómodamente a las inmediaciones de Ricardo.
Bajo ese guión, Gabilondo primero, con un gran disparo desde el borde del área, y Josetxo en propia meta después, tras una gran jugada de ataque del Ahtletic por la derecha, asestaron dos golpes casi definitivos ante un Osasuna sin mordiente y, lo peor de todo, sin fe.
Con Llorente muy activo, los de Caparrós controlaban el ritmo del partido y llegaban una y otra vez al área de Osasuna, pudiendo sentenciar el partido antes del tiempo de descanso.
Los navarros intentaron tímidamente darle la vuelta a la eliminatoria, pero su falta de convicción se pudo apreciar en la jugada más clara que dispusieron, un riguroso penalti que Portillo lanzó y que Gorza Iraizoz atrapó sin aparentes dificultades.
El Athletic, con mucha menos profundidad tras la reanudación, se limitó a conservar una cómoda ventaja que le permite clasificarse para los cuartos de final donde ya espera el Sporting, por un puesto entre los cuatro mejores equipos del torneo del 'KO'.
