BARCELONA, 3 Abr. (EUROPA PRESS) -
El preparador físico del primer equipo del RCD Espanyol, Jaume Bartrés, ha manifestado que la vuelta a la normalidad en el fútbol requerirá de dos a tres semanas de trabajo previo para poder garantizar "unos mínimos" de seguridad a nivel físico para los jugadores, que están haciendo ahora trabajo en casa pero no específico para la práctica del fútbol.
"Están haciendo trabajos inespecíficos del fútbol y la vuelta al trabajo requiere de un periodo de dos o tres semanas para garantizar unos mínimos. Hemos de pensar que estamos al final de la temporada, no es una pretemporada, en la que has de afrontar 11 partidos en un tramo de tiempo muy reducido", comentó en declaraciones facilitadas por el club.
Y es que el regreso a la competición es algo inseguro, en cuanto a fechas. "El regreso a la competición se plantea como algo complicado porque no tenemos una fecha exacta. Se va a necesitar una preparación que va más allá del tema físico", apuntó.
Bartrés explicó que los jugadores tienen un plan específico de entrenamiento, individualizado para cada jugador, y diseñado semana a semana. "Tienen contenidos comunes para todos, pero hay otros individualizados en base a parámetros médicos o físicos", argumentó.
"Les hemos entregado bicicletas estáticas y otro tipo de material para que puedan trabajar lo más cómodo posible. Ellos nos envían el 'rapport' de lo que van haciendo. Lo acompañamos con un vídeo que bajan de una plataforma y pueden hacer las sesiones con la información en la pantalla", añadió.
Cree que lo "fundamental" y lo que quieren transmitir a los jugadores de Abelardo es que mantengan una rutina diaria. "Un mismo horario para levantarse, las comidas, el entrenamiento. De esa manera pretendemos que sea lo más parecido a su día a día de cuando están compitiendo y que tengan el día lo más ocupado posible", opinó.
De cara a la sociedad en general, recomienda seguir rutinas y hacer ejercicio. "Si puede trabajar debe hacerlo y luego, en el aspecto físico, buscar las posibilidades que tenga para ejercitarse. Puede valer subir y bajar escaleras, poner un vídeo de clases dirigidas, hacer abdominales, saltar con una cuerda. Aquí entra en juego la imaginación y las posibilidades de cada uno, pero es imprescindible no parar. Cuanto antes nos adaptemos, mejor para todos", manifestó.
