BILBAO, 15 Ago. (EUROPA PRESS) -
El entrenador del Athletic Club de Bilbao, Joaquín Caparrós, resaltó que la Supercopa de España es "un premio" por el rendimiento del equipo vasco la pasada temporada, aunque avisó de que su equipo saldrá "a competir" contra el Barcelona, rival que "no notará las bajas" y al que al técnico ha visto en pretemporada mostrando las "mismas sensaciones" que le llevaron al triplete.
"La Supercopa es un premio por lo que se consiguió el año pasado. Sirve para recordar lo importante que fue deportiva y socialmente la temporada pasada. Nos jugamos un titulo muy importante para la entidad, los aficionados y los futbolistas", recordó Caparrós.
Para cosechar un buen resultado este domingo, el técnico andaluz considera que sus jugadores deben "hacer un buen partido en todos los conceptos", basado en "estar muy atrás, muy seguros" porque entiende que su equipo dispondrá "opciones de gol" después. "El contrario da mucha más motivación y cualquier resultado positivo refuerza", aseguró.
Respecto a su rival, Caparrós no cree que las bajas vayan a debilitar al Barcelona. "Lo he visto en pretemporada y las sensaciones que me ha dado son las mismas que al final del año pasado: intensidad, concentración y buen juego. Ya el año pasado dio señales de que cuando no jugaban unos futbolistas salían otros y hacían que no se notara, ganando en campos importantes", avisó.
Para encarar el encuentro, Caparrós cree que "la experiencia de la final de Copa tiene que servir, sobre todo a los futbolistas", a quienes exigió "competir" mañana. En San Mamés no estarán Javi Martínez, que descansará por decisión de su entrenador porque "terminó con molestias el último partido", así que como el joven Muniaín, a quien cree "conveniente dosificar".
Caparrós, que valoró la llegada de Mikel San José porque es "un chico de la casa" que generará "más competitividad en la plantilla", avisó de que el Athletic no debe pensar en el compromiso europeo que le espera. "Ya vendrá el importantísimo partido europeo. Si piensas en las dos cosas, malo. Debemos tener los cinco sentidos puestos en el Barcelona", zanjó.
